Llegó a La Habana primera parte de donativo de animales de Namibia

El primer envío de animales procedentes de Namibia llegó a Cuba este viernes, informó el diario oficialista Granma.

La operación forma parte de una donación realizada por el Gobierno del país africano llamada Arca de Noé II y esta valorada en 17 millones de dólares, informa hoy el rotativo.

La nota añade que para el operativo, en el que arribaron 131 animales de 20 especies representativas de la fauna africana, que serán acogidos por el Parque Zoológico Nacional de Boyeros, “se ejecutaron las medidas técnico-veterinarias exigidas para estos casos”.

De la familia de los ungulados (mamíferos cuyas extremidades terminan en pezuñas) destacan, entre otros: los antílopes roan y cuernos de corazón, impala común, gran kudu, eland del Cabo, oryx del pincel y búfalos africanos.

De los carnívoros llegaron ejemplares de hienas manchadas y pardas, leones, tejones de la miel, leopardos, chacales de espalda negra, linces caracal, zorros de orejas murciélago y guepardos. La donación se complementa con buitres de espalda blanca, avestruces de cuello rojo y puercos espín del Cabo.

Los animales, que proceden del Parque Nacional Etosha, deberán ahora someterse a un período de cuarentena en las instalaciones preparadas para ese fin en el propio Zoológico Nacional y en el Centro Nacional para la Producción de Animales de Laboratorio, donde “se cumplen las disposiciones veterinarias, epidemiológicas y de seguridad biológica existentes a nivel mundial”, añade la nota del rotativo oficialista.

Tras la cuarentena, los visitantes podrán “apreciar” a los animales que quedarán recluidos “en exhibidores de aparente libertad con condiciones semejantes a su hábitat natural de grandes espacios, como parte importante para su adaptabilidad, conservación y facilitación de futuros manejos reproductivos”, señala el reporte.

El segundo envío que dará término a Arca de Noé II está programado para 2013, cuando arribarán “quince mamíferos de gran porte, cinco de los cuales serán elefantes y el resto rinocerontes blancos y negros”.

“Millones” para el proyecto

El pasado mes de octubre Miguel Abud Soto, director general de Zoológico Nacional de Cuba, declaró que la donación enriquecería el acervo genético del parque, para lo que el Gobierno cubano había ahorrado “millones”.

“Nuestro gobierno ha ahorrado millones para este proyecto. El parque fue remodelado, parcialmente reconstruido y llevamos a cabo extensas labores de mantenimiento. Los animales podrán moverse en un régimen de semilibertad”, dijo el directivo a un diario namibio, de acuerdo con el reporte de Semana.

La operación de traslado de animales a la Isla ha desatado críticas por parte de grupos defensores de animales.

De acuerdo con la versión digital de la revista colombiana Semana, los activistas aseguraban que los animales sufrirán un largo y estresante viaje, de Namibia a Cuba, y serán posteriormente retenidos en condiciones de confinamiento.

Por su parte, el sitio Café Fuerte denunció a través de un vídeo la situación de los leones en el zoológico de la provincia de Camagüey, que mostraba a “siete leones desnutridos y en pésimas condiciones de cautiverio”.

El Zoológico Nacional “pide a gritos reformas económicas”

En artículo del sitio Havana Times, el corresponsal de la BBC en Cuba, Fernando Ravsberg, señala que la operación de traslado de animales desde Namibia y su acogida en Cuba “había desatado las iras del anticastrismo”, que “aseguraba” que “en los zoológicos cubanos los animales se mueren de hambre”.

En respuesta, asegura Ravsberg, “la dirección del parque invitó a un grupo de corresponsales extranjeros para comprobar la calidad de sus instalaciones”.

El corresponsal describe el paseo realizado por el zoológico capitalino como “encantador”, en el que el guía les hace notar que todos los animales “están muy bien alimentados”.

Justifica la operación porque “Cuba se estaba acercando a una crisis, necesitaban renovar animales ya que la mayoría nació en la isla y tienen lazos de consanguineidad por lo que no es recomendable cruzarlos entre sí”.

Describe además la dedicación de los trabajadores del zoológico hacia las criaturas que resguarda el recinto.

Aunque “tiempo atrás (…) durante la crisis de los 90, cuando no había comida ni para la gente”, los trabajadores confesaron “hacer de todo” para alimentar a los animales. “Hemos ido a buscar la comida a la provincia de Guantánamo”, dijeron y reconocieron que perdieron algunos ejemplares, aunque aseguran que salvaron a la mayoría, añade Ravsberg.

Según el corresponsal, actualmente el Zoológico Nacional “es otro lugar que pide a gritos las reformas económicas” en la Isla.

Los trabajadores comentaron, añade, que “no tienen problemas de alimentación pero los buses que recorren el parque son antiquísimos, no se les permiten formas de autofinanciamiento, turismo no los proyecta como excursión y apenas hay transporte público para que las familias cubanas los visiten”.

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