Catorce joyas de la música cubana

Tercer fonograma de la saga Buena vista Social Club, que inició en 1996 con la emblemática producción homónima de ventas millonarias en todo el mundo y un Premio Grammy de la Academia de Música estadounidense. Después vendría Buena vista Social Club en el Carnegie Hall (2008), que corroboró la popularidad de los veteranos músicos (Rubén González, Guajiro Mirabal, Compay Segundo, Puntillita, Pío Leyva, Ibrahim Ferrer…) convocados por tresero Juan de Marcos (Sierra Maestra) y el guitarrista Ry Cooder.

“Nos preguntan si no habíamos guardado material sobrante de las grabaciones de los álbumes que realizamos entre 1996 y 2008. Sabíamos que en nuestros archivos había mucho material valioso que no se incluyó en las más de 10 placas presentadas del elenco de Buena Vista Social Club. No teníamos tiempo para revisar: finalmente lo hicimos y nos sorprendió la calidad de la música encontrada. Lost and Found es resultado de la pesquisa que hicimos por las bóvedas de nuestro estudio, realizamos una selección e incluimos temas que conformaran cierta unidad: es como un fonograma grabado con un propósito: parece que fue producido ayer”, comenta Nick Gold, director de la disquera londinense World Circuit.

Joyas encontradas/Lost and Found (World Circuit, 2015): catorce temas que no se incluyeron en los álbumes que World Circuit produjo para Rubén González, Omara Portuondo, Cachaíto, Galbán, Angá y Guajiro Mirabal entre 1996 y 2004. Paseo por el son, la guaracha, el danzón, el bolero, el pregón-afro, la guajira, la descarga y la habanera.

Big Band conformada por piano (Rubén González, Adolfo Pichardo, Roberto Fonseca, Rubencito González), sección brass (saxofones: Javier Zalba, Pantaleón Sánchez, Ventura Gutiérrez, Rafael Jimmy Jenks; trombón: Jesús Aguaje Ramos, Demetrio Muñiz; trompetas: Alejandro Pichardo, Manuel Guajiro Mirabal, Luis Alemañy, Yaure Muñiz), percusiones (bongoes/clave: Carlos González; tumbadoras: Ángel Terry Domech, Miguel Angá Díaz; dumbek: Joachim Cooder; timbales: Filiberto Sánchez, Amadito Valdés; maracas: Alberto Valdés; güiro: Enrique Lazaga), contrabajo (Orlando Cachaíto López), guitarras (Jorge Chicoy, Manuel Galbán), batería (Ramsés M. González), laúd (Barbarito Torres), violín (Pedro Depestre) y voces (Ibrahim Ferrer, Eliades Ochoa, Omara Portuondo, Compay Segundo).

Vaya piquete All Stars —dirección alterna de Juan de Marcos, Demetrio Muñiz y Aguaje Ramos— en que destacan el pianista Rubén González (1919 - 2003), el contrabajista Cachaíto López (1933 - 2009), el guarachero Ibrahim Ferrer (1927 - 2005), el conguero Angá Díaz (1961 - 2006), el vocalista Eliades Ochoa, el sonero Compay Segundo (1907 - 2003), el trompetista Guajiro Mirabal, la bolerista Omara Portuondo, el laudista Barbarito Torres, el timbalero Amadito Valdés, el violinista Pedro Depestre (1945 - 2001) y la guitarra zafira de Manuel Galbán (1931 - 2011).

Apremiante prosodia de invitación bailable, reliquias del repertorio de la música popular cubana: del antológico afro-son “Bruca Maniguá” (Arsenio Rodríguez), al emblemático danzón “Bodas de Oro” (Electo Chepín Rosell), del sensual “Mami me gustó” —esa cosaque me hiciste Mami / me gustó / ay!, me gustó— (Arsenio Rodríguez), a la descarga jazzística “Black Chicken 37” (Cachaíto/Angá), del clásico bolero “Cómo fue” (Ernesto Duarte) al internacional bolero-son “Lágrimas negras” (Miguel Matamoros), de “Cómo siento yo” (Rubén González) al clásico “Quiéreme mucho”(Gonzalo Roig), de “Guajira en F” (Alegre All Stars) a “Pedacito de papel”(Francisco Alberto Simó Damirón), del sabroso son santiaguero “Macusa” —“cómo yo te quise / a ti Macusa / nadie te querrá / nadie, pero nadie / te querrá”— (Francisco Repilado) a la tradicional “Habanera” (dominio público), de “Tiene sabor” (Ignacio Piñeiro) al magistral solo de piano “¡Canta Rubén!”.

Ojo con la interpretación del afro-son “Bruca Manigua” por Ibrahim Ferrer y su orquesta; presten atención a la versión de “Macusa” —un son que compuso Compay Segundo a su primera novia santiaguera— bajo la dirección de Juan de Marcos y el dueto vocal de Eliades Ochoa y Compay; seductor arreglo al danzón “Boda de Oro”, el cual iba a formar parte del disco solista nunca concluido del trombonista Aguaje Ramos; una perla, la descarga “Black Chicken 37” improvisada en el estudio en 2005 para el disco del sobrino de Cachao, por Angá y Cachaíto: los productores decidieron archivarla; sublime la “Habanera” con la trompeta protagonista de Guajiro Mirabal (pieza que iba a formar parte de su álbum de 2004, dedicado finalmente a Arsenio Rodríguez); Omara se luce vocalizando “Lagrimas negra”, grabado en 1996 para el primer disco de la saga Buena Vista Social Club, el cual los ejecutivos resolvieron dejar fuera; cuidado con los solos de piano —extendidos sobre la melodía, lúdicos armónicamente y sutiles en su concepción rítmica— de Rubén González en “Como siento yo” y “¡Canta Rubén!”(Guía/clústeres de piano improvisados durante los ensayos en los estudio Egrem durante la grabación en 1996 de la primera placa de la serie); desbordada la banda en el son de Arsenio Rodríguez “Mami me gusto”: Cachaíto pulsa con virtuosismo montunero; Aguaje y Guajiro injertan riff de concordancias mayúsculas; “Guajira en F”: otra maravilla del disco aplazado de Aguaje Ramos.

Resumen de la riqueza melódica-armónica-rítmica de las proporciones musicales de la mayor isla del Caribe. Casi 20 años después volvemos a visitar el cosmos de unos intérpretes cardinales y concluyentes: cofre con 14 perlas, las cuales pueden escucharse en la tranquilidad de la tarde o bailarlas en los atajos de cualquier noche cumbanchera. O, si usted quiere, puede hacer las dos cosas a la vez. Qué bueno que Nick Gold rebuscó en sus ficheros donde, seguro, hay muchos más tesoros.

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