Cameron siente haber contratado al director de “News of the World”

El primer ministro británico, el conservador David Cameron, defendió su integridad el miércoles en un debate de emergencia en el Parlamento en el que dijo que lamenta el malestar causado por su decisión de contratar a un ex director del diario que está en el centro de un escándalo de escuchas.

Pero en las largas horas de tempestuoso interrogatorio pareció contar con el apoyo de su partido sin ceder a las demandas de que pida perdón directamente por contratar como portavoz a Andy Coulson, ex director de News of the World, una medida que el líder laborista definió como un “error catastrófico”.

Solo si se revelara que Coulson ha mentido acerca de que no tenía conocimiento sobre las escuchas telefónicas que practicó el tabloide, el primer ministro aseguró que entonces sí ofrecerá una “profunda disculpa”.

Los analistas dijeron que Cameron emergió del debate más fuerte que cuando se vio forzado a regresar antes de tiempo de una gira por África para intervenir ante los parlamentarios, que postergaron un día su receso de verano. Sin embargo, dejó algunas preguntas clave sin responder, sobre todo sobre su papel en el intento de Rupert Murdoch de comprar la cadena por satélite BSkyB, que luego abandonó por el escándalo.

Después de sus dos semanas más duras en el Gobierno, el primer ministro conservador, de 44 años, dijo: “No se toman decisiones en retrospectiva; se toman en el presente. Se vive y se aprende, y créanme, yo he aprendido”.

“Sobre la decisión de contratarlo (...) fue mi decisión (...) Por supuesto lamento y estoy extremadamente arrepentido por el furor que causó”, agregó. “Mirando atrás, no le habría ofrecido el empleo”.

Sobre Coulson, afirmó: “Tengo una visión anticuada sobre ser inocente hasta que se demuestre lo contrario. Pero si resulta que me han mentido, ese sería el momento de una profunda disculpa. Y en ese caso, les puedo decir que no me quedaré corto”.

Asediado pero no bajo una grave amenaza de ser derribado por su partido menos de 15 meses después de asumir el poder, Cameron defendió sus decisiones y las de sus colaboradores a la hora de tratar con la policía —dos de cuyos altos cargos dimitieron esta semana— y el imperio mediático de Rupert Murdoch, News Corporation.

“Parece haber obtenido algo de respiro durante el transcurso del debate”, dijo Andrew Russell, profesor de política de la Manchester University, agregando que mostró más seguridad el miércoles que en los últimos tiempos.

El líder laborista Ed Miliband, cuyo primer año al frente de la oposición había pasado desapercibido y ha recibido un impulso con este escándalo, definió la contratación de Coulson como un “error catastrófico”.

“¿Por qué no hace más que dar una disculpa a medias y pide verdaderamente perdón por contratar al señor Coulson y traerlo al corazón de Downing Street?”, preguntó Miliband.

Coulson fue contratado por el Partido Conservador cuando estaba en la oposición, en 2007, y llegó a la oficina del primer ministro tras las elecciones en mayo de 2010. En enero de este año dejó el cargo, justo antes de que la policía reabriera una investigación en la que tanto él como su predecesora como directora, Rebekah Brooks, habían sido detenidos y puestos en libertad bajo fianza.

Los diputados laboristas también cuestionaron al primer ministro por sus contactos con Murdoch y su personal, incluyendo su amistad con Brooks, quien dimitió recientemente como jefa de la unidad de diarios británica de News International.

Al día siguiente de que Murdoch negase ser personalmente responsable del escándalo, Cameron dio los últimos datos de la investigación judicial sobre el caso y los temas más amplios que ha causado en torno a las relaciones poco éticas entre los medios, la policía y los políticos en el país.

También trató de desviar la atención sobre el escándalo, y aseguró que los votantes quieren que su gobierno se centre en la gestión de la crisis económica y otros asuntos importantes.

El escándalo ha provocado la dimisión de altos cargos de News Corp y de dos jefes de policía, además de promover duras críticas de la oposición a la decisión de Cameron.

Murdoch, de 80 años, fue agredido por un manifestante con un plato con espuma blanca durante su comparecencia ante un comité parlamentario el martes, en la que ofreció una “humilde” disculpa, pero se negó a dimitir. El magnate australiano dijo que empleados que lo “traicionaron” son los responsables.

Luego envió un mensaje al personal de que su compañía está adoptando medidas para garantizar que “estos graves problemas no vuelvan a ocurrir”.

“Aquellos que traicionaron nuestra confianza deben rendir cuentas ante la ley”, dijo en el correo.

Los analistas han dicho que la disculpa televisada de Murdoch ha puesto la atención sobre Cameron. El escándalo incluye alegaciones de pinchar el contestador de una adolescente que fue asesinada y los teléfonos de soldados británicos muertos en Afganistán.

Un sondeo de Reuters/Ipsos MORI mostró que la satisfacción de los británicos con el primer ministro ha caído a su nivel más bajo desde que llegó al poder hace poco más de un año. Sólo un 38 % estaba contento con el modo en el que está desempeñando su trabajo

Unas horas antes de que Cameron interviniera ante los diputados, un comité parlamentario publicó un informe criticando a News International, la filial británica de News Corp, y a la policía por las acusaciones sobre escuchas telefónicas en el tabloide News of the World.

“Hubo un catálogo de fallos de la Policía Metropolitana e intentos deliberados de News International de frustrar varias investigaciones”, dijo Keith Vaz, presidente del comité de Asuntos Internos.

La policía dice que está investigando la intervención de los buzones de voz de posiblemente 4.000 personas.

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