www.cubaencuentro.com Martes, 02 de noviembre de 2004

 
  Parte 1/3
 
El fin de la circulación del dólar: causas y efectos
por CARMELO MESA-LAGO, Pittsburg
 

La Resolución 80 del Banco Central de Cuba, dictada el 23 de octubre de 2004, dispone lo siguiente: (1) a partir del 8 de noviembre prohíbe las transacciones de todo tipo en dólares estadounidenses, tanto para ciudadanos cubanos como extranjeros (incluyendo diplomáticos y turistas), empresas estatales nacionales, así como mixtas y de capital extranjero; (2) todas las transacciones (en tiendas de divisas-TRD, hoteles, restaurantes, taxis, etc.) deben ser hechas en "pesos convertibles" (en realidad no son convertibles porque no se transan en el mercado internacional, sino que su valor se fija arbitrariamente por el gobierno cubano a un valor igual al dólar) o en euros, dólares canadienses, libras esterlinas o francos suizos; (3) los dólares podrán ser cambiados en pesos convertibles (en casas de cambio-CADECA, TRD, hoteles y aeropuertos) con un gravamen del 10%, que disminuye el valor del dólar a 90 centavos, pero las cuatro monedas autorizadas no están sujetas a dicho gravamen.

Pesos y dólares
CADECA vigilada.

Agrega la Resolución 80/2004 del Banco Central de Cuba que: (4) las actuales cuentas bancarias en dólares continúan, aunque no pueden recibir nuevos depósitos en esa moneda (sólo en las autorizadas), pero pueden abrirse nuevas cuentas en dólares en que se aceptan depósitos en dólares; (5) las empresas mixtas y con capital foráneo, así como las representaciones extranjeras y diplomáticas, pueden solicitar permiso para extraer dólares en efectivo de sus cuentas bancarias con el gravamen del 10% pero, al parecer, las empresas nacionales pueden hacer esas extracciones sin pagar el descuento, y (6) los depósitos a plazo fijo y certificados de depósito en dólares no son afectados (pueden hacerse efectivos y recibir intereses en dólares sin el gravamen, así como renovarse) y las tarjetas de crédito tampoco son gravadas.

No obstante lo anterior, la Resolución afirma que "la población podrá mantener en su poder sin restricciones de ningún tipo, al igual que hasta el momento, dólares de EE UU… en cualquier cantidad" (Art. 1) y también que las medidas "no implican ningún tipo de limitación sobre la tenencia de dólares" (Art. 2). Pero en la práctica, la tenencia de dólares es permitida legalmente sólo para cambiarlos por pesos convertibles, para viajar al extranjero y otras poquísimas funciones.

Las causas

Según la Resolución, la razón de las medidas son las presiones del gobierno de EE UU sobre bancos extranjeros para impedir que Cuba pueda hacer depósitos en dólares para satisfacer sus obligaciones, y, más recientemente, la creación de un "Grupo de Persecución de Activos Cubanos" para detener el flujo de divisas hacia y desde Cuba.

El gravamen del 10% se justifica como una "compensación por los costos y riesgos que origina la manipulación de dólares a la economía nacional" y por el recrudecimiento del embargo estadounidense (Por Cuantos 1º y 2º, Art. 4).

El trasfondo es que Union des Banques Suisses (UBS), en Zurich, aceptó depósitos en dólares del gobierno cubano por siete años consecutivos —alcanzando la suma de 3.900 millones de dólares— y envió informes falsos al Banco de la Reserva Federal de Nueva York, el cual canceló el contrato con el UBS y le impuso una multa de $100 millones de dólares. Varios empleados de UBS han sido despedidos y están siendo investigados, además parece haber diplomáticos suizos envueltos en el escándalo.

Según la Resolución, esa suma procedía de los cobros en dólares hechos a turistas y a la población de Cuba por compras en tiendas de divisas y servicios prestados (Por Cuanto 2º). Pero hay una acusación de que la suma procedía de lavado de dinero por drogas; el mensaje de Fidel Castro leído en televisión citó partes de la acusación y la calificó de "infamia" sin revelar el nombre del autor, el analista cubanoamericano Ernesto Betancourt.

Pueden haber habido otras razones para las medidas. Una de ellas es la severa y creciente escasez de divisas, debido al fracaso de las políticas económicas cubanas y la deuda de 11.000 millones de dólares con el Club de París desde 1986, más otras con varios países, por lo cual es muy difícil obtener crédito y cuando se consigue es a corto plazo y con alto interés.

1. Inicio
2. La falta...
3. Este se volverá...
   
 
EnviarImprimir
 
 
En Esta Sección
Bush o Kerry: Propiedades o Derechos Humanos
ARTURO LOPEZ LEVY, Denver
La venezuelización de Uruguay
CARLOS ALBERTO MONTANER, Madrid
No tan republicanos
IVETTE LEYVA MARTíNEZ, Miami
Editoriales
Sociedad
Cultura
Internacional
Deporte
Opinión
Desde
Entrevista
Buscador
Cartas
Convocatorias
Humor
Enlaces
Prensa
Documentos De Consulta
Ediciones
 
Nosotros Contacto Derechos Subir