Disidencias y coincidencias

Este sábado 15 de marzo debe sesionar en el Hotel Sofitel, junto al Blue Lagoon, Miami, un “encuentro-conferencia” sobre las relaciones actuales entre Cuba y Estados Unidos, la comunidad cubano-americana y los cambios en la Isla. El eslogan reza: “Construyendo puentes para mejores relaciones.”

Allí mismo, en Blue Lagoon, Orlando Bosch preparó un torpedo de casi tres metros, pintado de azul y controlado por radio, con intención de atacar barcos cubanos (Miami News, 14 de junio de 1964). A la vuelta de medio siglo, el espíritu de los tiempos ha cambiado y tanto que Amanzon vende hoy a quilo ejemplares de aquel libro en que Andrés Oppenheimer hizo sonar la hora final de Castro.

Junto al Blue Lagoon se preparan ahora tres paneles para exponer los cambios en Cuba desde 2009, la dinámica de los contactos “pueblo a pueblo” en el marco de la administración Obama y el impacto de las relaciones Cuba-EEUU sobre los cubanos asentados en ambos lados del Estrecho de la Florida. Luego se abrirá un diálogo entre los participantes, que no tendrían que pagar por la conferencia, sino por el encuentro para almorzar en Sofitel al módico precio de $25.

Tres mosqueteros

Al estilo del folletín (1844) de Alejandro Dumas, las organizaciones que convocan al “encuentro-conferencia” son cuatro [CAFE, FORNORM, Generación Cambio Cubano y Cuba Education Travel], pero solo tres tienen calidad organizacional, aunque las cuatro sean una para todas y todas para una.

• Cuban Americans For Engagement (CAFE) agrupa cubano-americanos que abogan por normalizar las relaciones Cuba-EEUU. Sostienen acertadamente que la comunidad cubano-americana dista de ser monolítica y engloba más bien diversas posiciones con respecto al problema cubano. Este café plattista gusta a 733 personas con cuenta de Facebook.
• FORNORM [For Normalization] busca el mismo objetivo por otro flanco: educar a líderes empresariales y cívicos, políticos y pueblo en general sobre la historia y el estado actual de las relaciones Cuba-EEUU, con ánimo de encontrar nuevas vías para el bien de todos. A tal efecto pide a todos dar dinero a FORNORM [estas donaciones son tax-deductible] y acudir a las autoridades representativas en reclamo de mejores relaciones Cuba-EEUU. Marca muy buen punto con que el enfoque del diferendo hasta hoy arroja tantas oportunidades de solución malogradas como despilfarros del dinero de los contribuyentes de EEUU.
• Cuba Educational Travel es una compañía de responsabilidad limitada (LLC) con licencias del Departamento del Tesoro para involucrarse en viajes a Cuba por las modalidades “contacto pueblo a pueblo” e “intercambio académico y cultural”. Su gerente es Collin Laverty, quien da cuenta en Cuba’s New Resolve (Center for Democracy in the Ameritas, 2011) tanto de las reformas económicas bajo la administración de Raúl Castro como de sus implicaciones para la política de EEUU hacia Cuba.

D’Artagnan

En el tinglado de Blue Lagoon, este personaje es Generación Cambio Cubano (GCC), que el 21 de abril de 2009 anunció su conversión en “organización apolítica, no lucrativa y amparada por la ley” para certificarse como disidente frente al mainstream mediático anticastrista que corre en medio de la inmigración mayoritariamente apática.

GCC procedió de forma coincidente con esas organizaciones dentro de Cuba que Fidel Castro suele despachar como “grupúsculos”. Aquel anuncio germinal lo firmaron cuatro gatos y nada más apareció en su página web. GCC se constituyó con sede social en la misma dirección particular de Hugo Cancio y como directores se anotaron él mismo y tres más: Cherie y Christie Cancio, ambas en la misma dirección, y Dayri Blanco, en otra distinta. Al año siguiente, el 24 de septiembre, GCC se disolvió administrativamente por inactividad, pero reaparece ahora, sin amparo de ninguna ley, en el cuarteto organizativo de Blue Lagoon.

Sin aludir a GCC, Hugo Cancio había firmado como “activista”, el 26 de octubre de 2013, la carta en que FORNORM y CAFE explicaron a The Miami Herald por qué Cayo Hueso debía recibir al jefe de la Oficina de Intereses de Cuba en Washington. Ahora reaparece entre los panelistas como fundador y presidente de Fuego Enterprises, así como editor jefe de la revista OnCuba.

Esta revista se dice publicada por una compañía del grupo Cuba Business Development (CBDG), pero esta corporación, que se trasladó en 2009 de Nevada a Miami Lakes, fue revocada en el informe anual 2010 y está inactiva, como otras casi veinte empresas de Cancio, desde Cubatours y Havatours hasta Mobile Activation Services y Family Services & Charters.

Ni Cancio ni Laverty firmaron la carta abierta de 29 de agosto de 2012, que se colgó hasta en el blog de Mariela Castro, mediante la cual la Junta Directiva de CAFE y el Comité Ejecutivo de FORNORM advirtieron a los comités nacionales de los partidos Republicano y Demócrata que sí se puede resolver el diferendo.

Coda

Además de Laverty, Cancio y los directivos y ejecutivos de CAFE y FORNORM, el espíritu de los tiempos trae también como panelistas a Geoff Thale (ONG WOLA) y Guillermo Grenier (Universidad Internacional de la Florida), el bloguero Yasmín Portales, los editores de Espacio Laical y hasta el dueño de la paladar Doña Eutimia (Habana Vieja).

La mesa está servida para la puja entre dos plattismos. Mientras la oposición anticastrista no sabe cómo desaparecer, tras volverse inútil para que desparezca el castrismo, y cifra la esperanza de supervivencia en Washington y sus aliados, ya toma asiento en Blue Lagoon la bandería que apuesta por la mejor relación con EE. UU. como clave del desarrollo en Cuba y congrega a quienes se arrepintieron [de repudiar a Castro al irse de Cuba] de haberse arrepentido [de cerrar filas con Castro dentro de la Isla].

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