El disidente cubano Eloy Gutiérrez Menoyo llegó por sorpresa a Miami casi un año después de anunciar que se quedaba en Cuba para "hacer oposición", informó el sábado el diario El Nuevo Herald.

El controvertido líder de Cambio Cubano, una organización con sede en Miami, viajó el viernes desde Madrid a la Florida, donde residió hasta agosto de 2003.

Gutiérrez Menoyo dijo al periódico que se trataba de "un corto viaje personal". Agregó que hacía mucho no veía a su esposa y a sus hijos, y no sabía cuándo podría verlos de nuevo.

El opositor afirmó que, tras pasar unos días en Miami, regresará a España, pero no precisó si volverá a Cuba.

"En unos días, cuando yo salga de aquí de Miami, yo vuelvo a España; lo otro queda ya a la imaginación", dijo.

El diario recordó que Gutiérrez Menoyo ha estado fuera de Estados Unidos durante 11 meses. Las leyes migratorias estadounidenses obligan a los residentes a viajar al menos una vez al año al país para no perder la residencia, y el opositor es residente permanente.

El líder de Cambio Cubano salió de Cuba el pasado 30 de junio para asistir como invitado al Congreso Federal del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

Fue el único, de una lista de cuatro disidentes invitados, al que las autoridades cubanas no pusieron obstáculos para viajar a España.

"No tengo siquiera un permiso de salida. Como no tengo estatus legal, no me dieron permiso de salida", dijo.

Según El Nuevo Herald, salió de la Isla sin permiso de salida por carecer de estatus legal. Viajó con su pasaporte cubano, con el cual ingresó en Estados Unidos.

Gutiérrez Menoyo afirmó haber hablado en España con el presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y otros miembros del gabinete.

"Ellos tienen la intención de mejorar las relaciones con Cuba porque entienden que la vía de confrontación no es la posición europea. Pero al mismo tiempo, están demandando la liberación de los presos y que se den indicios de cambios en la política de Cuba, el principal de los cuales es el caso de los presos. El propio (Zapatero) ha manifestado el deseo de que sean liberados todos los presos, y principalmente Raúl Rivero", dijo.

Gutiérrez Menoyo, de 69 años y de origen español, es un ex comandante de las luchas que terminaron con la llegada al poder de Fidel Castro.

Abandonó Cuba por sus desacuerdos con el régimen instaurado y luego pasó 22 años en la cárcel tras un intento armado contra el gobierno cubano.

De regreso al exilio fundó Cambio Cubano. El año pasado sorprendió a la opinión pública con su decisión de quedarse en Cuba. La Habana no ha aclarado su estatus legal, pero tampoco le ha obligado a marcharse.

"Podrán prolongar el tiempo que quieran legalizar mi estatus, pero más tarde o más temprano lo tienen que dar", dijo Gutiérrez Menoyo, quien considera estar reclamando un derecho que le corresponde.

El opositor afirma estar consciente de que su permanencia en la Isla pasa por la decisión de Castro. "El jefe de inmigración y extranjería me dijo que no tenía ni idea de cuándo iba a resolver mi caso. Lógicamente, me estaba diciendo claramente que no está en sus manos".

La presencia del ex comandante en Cuba ha estado marcada por la polémica. El líder de Cambio Cubano ha arremetido contra las organizaciones de la oposición interna, a las que acusa de ser permeables a los intereses de Estados Unidos.

Gutiérrez Menoyo cree que una de las razones por las cuales el gobierno no se ha pronunciado sobre su estatus legal es porque también está pidiendo "algo que es más difícil y es una meta más engorrosa, que es un espacio legal para la oposición independiente".

"Esto me lleva a estar todo el día recibiendo disidentes, diría que de toda la Isla, conversando con ellos y, lógicamente, lo hago desde un plano muy cauteloso, porque indudablemente la inteligencia en Cuba ha trabajado, creando un gran porcentaje de esa disidencia", afirmó, según El Nuevo Herald.