AFP/ Miami. La exiliada cubana Isabel Roque pidió el lunes entre sollozos a Estados Unidos, Europa y el Vaticano que presionen al gobierno cubano por la liberación de su hermana, la disidente Martha Beatriz Roque, quien podría morir en su celda en la Isla de un momento a otro, según sus familiares.

"Pido a esta administración del presidente (George W.) Bush, a la comunidad europea, al Vaticano, que alcen sus voces, que intercedan por Martha Beatriz", dijo Isabel Roque en una conferencia de prensa en Miami.

"Lo pedimos para que salga con vida de la prisión", agregó, ya sin poder contener su llanto.

Isabel Roque explicó que Martha Beatriz, condenada a 20 años de cárcel, está en condición grave y que no recibe la atención médica que necesita.

El abogado y activista Larry Klayman, que representa a las hermanas Roque, dijo que él mismo le pidió al viceprimer ministro italiano, Gianfranco Fini, que interceda ante Estados Unidos para que se presione al régimen de Fidel Castro.

En el momento de su detención, Martha Beatriz Roque, de 57 años, era una de las líderes de la Asamblea para Promover la Sociedad Civil, que integran más de 300 organizaciones opositoras cubanas. La economista cumple su sentencia en la prisión de Manto Negro, en La Habana.

Es la única mujer entre los 75 disidentes que los tribunales del gobierno cubano enviaron a prisión en abril, con penas de hasta 28 años.

Klayman, quien dirige la organización Judicial Watch, dijo que Martha Beatriz enfermó la semana pasada y sufre serias hemorragias en su celda.

"Ahora es el momento para que la Unión Europea, el Vaticano y Estados Unidos intervengan", dijo Klayman, "si no hacen una intervención significativa ahora, esta disidente (...) morirá".