Deben los cubanos agradecer a Roland T. Ely

—extranjero cuyo amor a Cuba trasciende en estas páginas—
este impar esfuerzo, como fruto sazonado
y jugoso que honra la bibliografía cubana.
José R. Álvarez Díaz. Duke University Press. Book Review 11-1-64

Se trata de un compendio de datos, cifras y estadísticas en un prolijo y exhaustivo análisis de la industria azucarera cubana.

Además de la abundante y documentada información sobre el cultivo de la caña, su conversión en azúcar, mieles y derivados, este libro relata los hechos históricos más relevantes del periodo que abarca (1492-1963), así como acotaciones folclóricas y hasta simpáticas anécdotas de algunos de los colonos, hacendados y banqueros mencionados.

Como resultaría imposible condensar su contenido, intentaré dar una idea de su creación y de la ingente labor de su autor.

El libro consta de ocho partes, con numerosas subdivisiones cada una.

1.- Cuba entre las dos Isabelas (1492-1832)

2.- El último mohicano del capitalismo mercantil

3.- Una pequeña gran epopeya de navegación comercial

4.- La corte de su majestad el azúcar

5.- Bases de la economía azucarera cubana

6.- El impacto del vapor

7.- Más desafíos para el hacendado

8.- La sociedad del azúcar

La sola relación de los anexos y el número total de páginas (875) revelan la importancia de esta monumental obra, sin duda: la imprescindible y definitiva historia de la mayor fuente de riqueza de nuestro país.

Prefacio 13 páginas

Bibliografía 37 páginas

Glosario 5 páginas

Índice general 5 páginas

Índice analítico 26 páginas

Personas e instituciones

Temas varios

Lugares

Ingenios y empresas azucareras

Barcos

Diarios y revistas

Índice de estadísticas

Índice de láminas en colores 2 páginas

Índice de figuras (grabados, mapas, alusivos al texto) 3 páginas

Dos extractos tomados al azar, bastan para ilustrar la minuciosidad de la investigación efectuada por Roland T. Ely.

I

Gastos de una hacienda en 1863. Inversión inicial:

150 negros esclavos de distintas edades y de ambos sexos, a un promedio de $700.00 c/u.

II

Sueldos anuales de una hacienda azucarera de Cuba en marzo de 1846:

Administrador….$2,300.00

Maquinista……...$1,200.00

Mayoral…………$ 500.00

Médico………….$480.00

Mozo de mulas...$ 300.00

Roland T. Ely (1924-2014) era descendiente de Moses Taylor (1806-1882), y primo de uno de los miembros de la familia cubana Menocal. Ambas referencias explican su interés en el tema Taylor-Cuba-Azúcar.

Ely comenzó su investigación en el sótano de la Biblioteca Pública de Nueva York, en la primavera de 1951, mientras revisaba la colección de Moses Taylor, banquero y comerciante (uno de los hombres más ricos de su época), que nunca visitó Cuba, pero que estuvo muy vinculado con la financiación de la industria azucarera cubana.

Fue una ardua tarea, ya que los libros y documentos habían sido vandalizados y estaban llenos de polvo y suciedades.

Posteriores investigaciones, especialmente las relacionadas con el magnate cienfueguero Tomás Terry, las realizó Ely en Cuba durante sus frecuentes visitas a la Isla.

El libro está escrito en español y no hay dato que indique que fuera traducido. Roland T. Ely, alude indirectamente a este asunto al agradecer a Moisés Katznelson, de Buenos Aires, la revisión y corrección de esta versión en la lengua cuya frecuentación tantas satisfacciones y amistades me han deparado. El prólogo está firmado en la finca «Hormiguero», propiedad del autor, en Princeton, Nueva Jersey.

Qué lejos estaba Roland T. Ely de prever que pocos años después de publicar su libro en 1963, su majestad el azúcar se habría de convertir en un harapiento mendigo.

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