Actualizado: 23/04/2024 20:43
cubaencuentro.com cuba encuentro
| Internacional

Brasil

El poderoso ministro de Hacienda presenta su renuncia

Antonio Palocci enfrentaba desde hace varios meses acusaciones de corrupción.

Enviar Imprimir

El ministro brasileño de Hacienda, Antonio Palocci, considerado el arquitecto de las políticas económicas del gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva y apreciado en los mercados financieros, puso fin este lunes a lo que llamó "el infierno" de las dos últimas semanas y renunció al cargo.

"Palocci decidió solicitar a la Presidencia de la República su alejamiento del cargo", informó el Ministerio de Hacienda en un comunicado, informó la AFP.

Su sustituto será Guido Mantenga, un economista de 56 años y actual presidente del Banco de Desarrollo Económico y Social (BNDES), anuncio André Singer, vocero de prensa del palacio de gobierno, según AP.

El BNDES —el banco de inversión del gobierno federal— quedará en manos de su actual vicepresidente, Demian Fiocca, indicó el portavoz.

También fue confirmada la renuncia de Jorge Matosso, presidente de la Caixa Económica Federal, el segundo mayor banco estatal.

La renuncia de Palocci dejaría al presidente Lula más solo que nunca y ante una inminente reforma de su gabinete obligada por las elecciones del próximo 1 de octubre.

El poderoso ministro de Hacienda ha dejado el cargo, además, cuando los sondeos de opinión mostraban una recuperación de la popularidad de Lula, que había caído en medio de los escándalos de 2005.

Palocci, uno de los "hombres del presidente", a quien el propio Lula defendió a capa y espada durante meses, cayó acorralado por denuncias con tintes sexuales que se agravaron con sospechas de que utilizó su inmenso poder para violar el secreto bancario del casero de una mansión de Brasilia, informó EFE.

Esa mansión, según la oposición, fue alquilada por antiguos colaboradores de Palocci en la época en que era alcalde de Ribeirao Preto, antes de asumir Hacienda, y era escenario de bacanales con prostitutas, a los que eran invitados empresarios que fraguaban turbios negocios con el gobierno en medio de las fiestas.

Auque Palocci negó decenas de veces haber estado en esa casa, el casero Francenildo dos Santos Costa afirmó que lo vio allí entre 10 y 20 veces.

Antes de renunciar, Mattoso admitió que la Caixa Económica Federal violó el secreto bancario del casero y comprobó depósitos en su cuenta por unos 20.000 dólares, que para el oficialismo eran la prueba de que Dos Santos Costa había sido "comprado" para acusar a Palocci.

Mattoso dijo que entregó a Palocci el extracto bancario del casero, una operación que es ilegal.

Según fuentes policiales, Palocci puede ser acusado penalmente por la violación del secreto bancario y enfrenta averiguaciones para determinar cómo el extracto bancario llegó a una revista, que lo publicó hace diez días.

Fuentes del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) dijeron a EFE que la pesadilla del gobierno es ahora la posibilidad de que Palocci pueda ser detenido, al menos en forma preventiva, en medio de la campaña para las elecciones de octubre.

Palocci fue el coordinador de la campaña de Lula en las elecciones de 2002, y luego la cara seria de la economía ante los mercados.

De los asuntos más políticos, como constituir la coalición que llevó a Lula al poder, se ocupaba José Dirceu, ex presidente del PT que asumió en enero de 2003 el estratégico Ministerio de la Presidencia.

Pero Dirceu cayó abatido por el caso de sobornos parlamentarios que desde el año pasado tiene al gobierno contra las cuerdas.

Además de ser obligado a renunciar al gobierno, Dirceu perdió su escaño de diputado y quedó fuera del juego, igual que ahora Palocci.

Para empeorar las cosas, esta semana Lula deberá reformar su gabinete, ante la salida de entre siete y diez ministros que se postularán para algún cargo en octubre y, por la ley electoral, tienen plazo hasta el viernes para abandonar el gobierno.

Con el país en un anticipado clima de campaña, la caída de Palocci le ha dado más armas a una oposición decidida a seguir investigando.

El diputado Rodrigo Maia, líder del derechista Partido del Frente Liberal (PFL) en la Cámara Baja, dijo hoy que "la salida de Palocci es otro capítulo, pero no detiene el 'efecto dominó' que ha atrapado a las figuras" del gobierno.

Según Maia, ni siquiera el ministro de Hacienda "puede tomar solo la decisión de violar el secreto bancario de un ciudadano".

En una nota, el PFL calificó la caída de Palocci como "otra victoria de la sociedad contra el crimen y la mentira".

El senador Tasso Jereissati, presidente del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), fue más concluyente. "Con Palocci cae el último pilar del gobierno de Lula, que parece acabar anticipadamente", declaró.

Sin embargo, en declaraciones a la salida del palacio de gobierno, tras reunirse con Lula, el nuevo ministro de hacienda dijo que "esa idea de que (el presidente) está solito, aislado, es una fantasía".

Mantenga garantizó que "la política económica no cambiará".

"¿Por qué? porque la política económica que estamos practicando no es de un ministro… es la política económica del presidente Lula, el presidente es el fiador de la política", dijo.

"Es la política más exitosa de los últimos 15 ó 20 años de Brasil", añadió el funcionario, quien había ocupado la cartera del Ministerio de Planificación desde enero del 2003 hasta noviembre del 2004. Lula lo designó luego para el BNDES en una reorganización de su gabinete.