Cuba registró de enero a junio de este año un aumento en los accidentes de tráfico y en el número de personas fallecidas por esa causa, en relación con el mismo periodo de 2011, informaron ayer autoridades locales.

Según las fuentes, al concluir junio pasado se reportaron en el país 5.637 accidentes viales, cifra sin precedentes en los últimos 12 años.

La accidentalidad vial registró en el primer semestre del año 363 fallecidos y 4.388 lesionados, las cifras más altas desde el año 2000.

Según un reporte de la agencia Xinhua, el jefe de la Dirección Nacional de Tránsito de la Isla, teniente coronel Mario Ríos, dijo a la televisión nacional que solo una provincia, de las 15 que tiene Cuba, decreció en los tres indicadores de accidentalidad vial, los cuales aumentaron en nueve territorios, incluidos La Habana, Santiago de Cuba y Holguín, los más poblados del país.

Ríos explicó que el factor humano sigue siendo la principal causa, por no atender el control del vehículo, no respetar el derecho de vía, manejar a exceso de velocidad y realizar adelantamientos indebidos.

El reporte añade que un oficial de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) agregó que pasajeros y conductores suman el 80 % de las víctimas, y los vehículos pertenecientes a empresas estatales participan en la mitad de los sucesos.

Los accidentes viales constituyen la primera causa de muerte en Cuba en las edades entre uno y 19 años, y la quinta entre toda la población.

Ante la alarmante situación, la Comisión Nacional de Seguridad Vial refuerza las medidas de responsabilidad institucional e individual en la materia, como las inspecciones técnicas sorpresivas a vehículos en la vía, señala la agencia.

Estas revisiones demostraron que más de 2.300 equipos automotores (15 %) no estaban aptos para circular por problemas técnicos, de los cuales más de 400 fueron retirados de circulación.

El experto agregó que el uso de calles, carreteras, caminos y avenidas por carros de tracciones animal y humana complica el panorama y conlleva a crear espacios y modos de protección hacia estos medios y sus pasajeros, razón por la cual se realizan encuentros con sus conductores para instruirlos y capacitarlos.

Un tema considerado “complejo” por el inspector general es la alcoholemia, ya que durante análisis realizados de forma sorpresiva en la vía pública se detectó que uno de cada cinco choferes examinados conducía bajo los efectos del alcohol.

Además de los rigurosos exámenes técnicos y de alcoholemia en la vía, otra medida para disminuir los índices de accidentalidad vial es la reparación de caminos, muchos de ellos en mal estado y con poca iluminación, además del mejoramiento de la señalización en tramos de gran circulación.

De acuerdo al reporte para lograr una mayor educación vial existe un amplio programa que incluye los medios de difusión, creación y funcionamiento de los círculos de interés y el intercambio directo con los estudiantes de los diferentes niveles, explicó Del Toro.

En 2011 Cuba implantó un nuevo código vial que impone medidas más severas contra infracciones como el exceso de velocidad o conducir bajo los efectos del alcohol.

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