La revitalización económica de Cuba pasa por una potenciación de los pequeños y medianos negocios privados por parte de La Habana y una flexibilización de los obstáculos desde Washington, señaló este jueves el Cuban Study Group.

“La transición ordenada de la economía cubana hacia los mercados es definitivamente lo que más le conviene a Cuba, a los Estados Unidos, y a la región”, apuntó en un estudio titulado Apoyo a la pequeña empresa en Cuba.

El Cuban Study Group es una organización estadounidense de empresarios de origen cubano que busca una reunificación pacífica del pueblo cubano dentro del Estado de derecho y la economía de libre mercado.

El Cuban Study Group recomendó a las autoridades cubanas aprender de las lecciones de China, Vietnam y Singapur, y apoyar el desarrollo de pequeñas y medianas empresas dentro del sector privado como camino hacia un “crecimientos sostenible”.

Propuso, además, la creación de un fondo de microcréditos de 50 millones de dólares para los “ciudadanos cubanos que quieran abrir pequeños y medianos negocios”.

Asimismo, valoró las recientes reformas económicas emprendidas por el Gobierno de Raúl Castro con el “objeto de permitir mayor actividad económica del sector privado a fin de reducir los gastos gubernamentales, incrementar la productividad y aumentar los salarios”.

En septiembre de 2010, La Habana anunció la eliminación de hasta 1,3 millones de trabajadores de las nóminas de pago de las empresas estatales y la creación de 178 nuevas categorías de autoempleo.

De producirse, destaca el informe, “estas reformas representarán la remodelación económica de mayor envergadura que Cuba haya tenido en medio siglo”.

Los retos de Cuba para el desarrollo del sector privado implican “la liberalización de precios, el acceso a capital, la reducción impositiva, la consistencia política y la asociación con socios extranjeros”.

El centro de investigación, con sede en Washington D.C y creado en 2000, se mostró esperanzado de que estas propuestas sean analizadas en el próximo VI Congreso del Partido Comunista de Cuba, que tendrá lugar entre el 16 y el 19 de abril en La Habana.

Asimismo, destacó la importancia de que la Administración del presidente Barack Obama suavice las restricciones impuestas por el embargo económico, aunque reconoce el valor de las recientes decisiones sobre remesas y viajes a Cuba.

“A la vez que el Gobierno cubano empiece a reformar su economía para permitir mayor actividad económica privada y autoempleo, el Gobierno estadounidense debe evaluar el impacto de sus sanciones comerciales sobre el desarrollo de la pequeña empresa en Cuba”, explicó el Cuban Study Group.

Entre las medidas que recomienda a Washington figuran la modificación de las restricciones a las exportaciones, la autorización de operaciones bancarias bilaterales y facilitar la entrada de Cuba en organismos multilaterales.

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