El comercio entre Cuba y México disminuyó un 75% entre 1995 y 2007 para ubicarse en alrededor de 100 millones de dólares, dijo el vicepresidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores mexicanos (ANIERM), Humberto Simoneen Ardila, informó el periódico El Economista en su sitio en internet.

De acuerdo con la publicación mexicana, Simoneen dijo en una entrevista con la agencia Notimex que el estancamiento comercial se debió a la reducida oferta exportable de Cuba, a la deuda de más de 400 millones de dólares de la Isla con exportadores mexicanos y al enfriamiento de las relaciones durante el gobierno de Vicente Fox.

El directivo detalló que del comercio total entre las dos naciones, el 87% corresponde exportaciones mexicanas, el resto son ventas cubanas, lo que es "relativamente" reducido comparado con el comercio con otros países.

Cuba tiene 11 millones de habitantes, "no es un país que implique un mercado muy vigoroso", dijo Simoneen.

El comercio con la Isla, en relación con el total de las exportaciones mexicanas, "prácticamente no pinta", afirmó el directivo, "es un porcentaje nada representativo; no llega ni al 1.0% del total de las exportaciones mexicanas", resaltó.

El empresario añadió que la Isla tiene una reducida flexibilidad para abastecer a otros mercados. "La economía cubana está más encuadrada en satisfacer las necesidades locales que a vender en los mercados exteriores, eso suena congruente con el tipo de economía que tenía México antes de la apertura, en los años setenta y principios de los ochenta".

Simoneen Ardila recordó que las relaciones entre La Habana y México se enfriaron durante el gobierno de Vicente Fox.

"En 1990 el comercio recíproco era de 158 millones de dólares entre los dos países. El momento más importante en la relación fue en 1995, cuando ese comercio se elevó a 400 millones de dólares, pero de 1995 a 2007 se ha venido reduciendo consistentemente al llegar a poco más de 100 millones de dólares", detalló.

El directivo rechazó que la ley estadounidense Helms-Burton haya incidido en el intercambio México-Cuba.

"México nunca respondió a la ley Helms-Burton porque era, entre otras cosas, una ley extraterritorial, es decir la ley de un país debe circunscribirse a su territorio, no a otros Estados. Es probable que empresas de capital estadounidense que operan en México reduzcan o no tengan actividad comercial con Cuba, pero las empresas mexicanas nunca se alinearon a ese principio", sostuvo.

En ese sentido, puntualizó que "el problema de Cuba" es la dificultad para liquidar sus adeudos, "situación que ahuyenta a cualquier vendedor", aunque recordó que hay intentos de los dos países por resolver esa situación con una reestructuración firmada el mes pasado.

México exporta a Cuba partes y refacciones para transporte, aluminio y manufactura de aluminio, pinturas y barnices, artículos de limpieza como detergentes, comprensores para equipos frigoríficos, y materiales y manufacturas pláticas, en tanto que se importa de la Isla tabaco, algunos desechos de hierro, alcohol etílico y ron.

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