La industria azucarera cubana realiza la denominada "zafra chica" de diciembre, con 14 fábricas en marcha que deben llegar a un total de 52, de acuerdo con los planes previstos para la cosecha 2007-2008, según medios oficiales.

La zafra azucarera cubana comenzó el pasado 10 de diciembre por un central de la provincia de Granma, con pronósticos de "difícil molienda" debido a las lluvias caídas en los últimos meses en la región oriental de la Isla, informó EFE.

El director de Control y Análisis del Ministerio del Azúcar, Osiris Quintero, indicó que las fábricas en operación radican en las provincias de Pinar del Río, Matanzas, Villa Clara, Camaguey, Las Tunas, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo.

En declaraciones a la agencia oficialista Prensa Latina, el funcionario precisó que las fábricas de otras provincias se incorporarán a la molienda en enero próximo, cuando esté en pleno funcionamiento la zafra, programada para un promedio de 96 días buscando un mayor aprovechamiento de las capacidades fabriles.

Los recursos, piezas y equipos han estado listos en la fecha prevista en la mayoría de las empresas, señaló Quintero, aunque reconoció como un factor negativo a tener en cuenta las afectaciones provocadas por las intensas lluvias de octubre y noviembre pasado, y las inundaciones que causaron en las provincias orientales de la Isla.

La elevada humedad en las plantaciones de caña es un elemento que afecta la concentración de azúcar y el rendimiento de la gramínea, de acuerdo con especialistas de ese cultivo.

Uno de los aspectos señalados por las autoridades del azúcar de cara a la actual cosecha es el "gran desafío" que ha representado rehabilitar los caminos destruidos por las lluvias, que comunican las plantaciones de caña con las fábricas, y asegurar que la molienda no rebase los días previstos.

Fuentes del sector azucarero han anunciado la participación de 52 centrales en esta zafra y un incremento de más del 12 por ciento en el volumen de materia prima, en comparación con el planificado en 2006.

En esta zafra está previsto que un 87 por ciento del corte de caña se realice con medios mecánicos, mientras que la cosecha manual estará a cargo de 21.384 trabajadores.

La pasada cosecha azucarera en la Isla sufrió las inclemencias del tiempo, retrasos en la llegada de recursos que demoraron la arrancada de las fábricas, y bajas e inestables molidas, entre otros factores, cuando las autoridades intentaban dar un nuevo impulso al sector.

A pesar de disponer de mayores recursos y caña, la cosecha de 2006 sólo alcanzó alrededor de 1,2 millones de toneladas, de acuerdo con datos no oficiales. El plan trazado era de 1,5 millones de toneladas.

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