Cuba comienza a ser uno de los destinos preferidos por los estadounidenses dentro del sector del turismo gestionado por museos. Un reportaje del The New York Times informaba ayer que el Museo de Arte Woodson, de Wausau en Wisconsin, una sala de arte pequeña, se propone lanzar un viaje a la Isla y que su propuesta está teniendo buena aceptación.

En artículo publicado este miércoles en la versión en línea del diario estadounidense, Ruth Schuette, agente inmobiliaria y asociada al museo, declaró que estaba entusiasmada por unirse a la propuesta, ya que “No deseo arriesgarme y viajar a Cuba a través de Canadá o de otro país”.

Schuette dijo además que tampoco quería “llevar a cabo todos los preparativos yo sola, y sé, por mis anteriores viajes gestionados por museos, que formaré parte de un grupo de personas interesados en experiencias similares, y que nos mantendremos en contacto después del viaje”.

Varios de los grandes museos estadounidenses —y ahora un número cada vez mayor de los pequeños— están ofreciendo viajes nacionales e internacionales, entre ellos los de Cuba, muy de moda en estos momentos, según el artículo de Elizabeth Olson.

Instituciones importantes, como el Museo Metropolitano de Nueva York y la Galería de Arte Corcoran de Washington, ofrecen visitas turísticas por la Isla y otros destinos que resultan difíciles de preparar de manera individual.

Los viajes tramitados por museos suelen costar entre 4.000 y 10.000 dólares, si bien los de Cuba están entre los de precios más bajos.

Los Viajes del Smithsonian, uno de los grandes en el campo del turismo gestionado por museos, opera cerca de 180 viajes al año, y algunos de los beneficios se invierten en investigaciones y muestras de la propia institución.

El Smithsonian comenzó a facilitar los viajes en fecha tan temprana como 1970 y, como muchas otras instituciones, brindaba, y todavía lo hace, ofertas exclusivas a donantes y miembros de la junta, aunque también ayudó a democratizar los viajes al ofrecerlos abiertamente al público.

Actualmente el Smithsonian brinda viajes muy variados y los de Cuba como destino suscitan mucho interés.

Los viajes a la Isla para ciudadanos no cubano-estadounidenses requieren de una licencia del Departamento del Tesoro y se reservan para programas de educación y cultura.

Según The New York Times, Emily Van Agtmael, diseñadora de interiores de Maryland, quien acaba de regresar de un viaje a Cuba gestionado por el Corcoran, declaró que la guía del Museo Nacional allí seleccionada por la galería de Washington para explicar el lugar “marcó la diferencia; gracias a ella sí pudimos apreciar la colección que exhibían”.

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