El gobierno otorgó hasta el día 11 de marzo 171.000 nuevas licencias para ejercer el trabajo privado, según estadísticas del Ministerio del Trabajo y Seguridad Social (MTSS) divulgadas el domingo.

El trabajo por cuenta propia “busca su dimensión exacta en la concepción estratégica de la economía cubana”, resalta un reportaje en la edición dominical del rotativo oficial Juventud Rebelde.

Entre las 178 actividades autorizadas a realizar en negocios particulares, las opciones más “elegidas” son “elaboración y venta de alimentos”, “comprador-vendedor de discos” y el “productor-vendedor de artículos varios de uso en el hogar”, según medios locales.

La contratación de trabajadores, el transporte de pasajeros, el arrendamiento de viviendas y la mensajería son otras de las actividades más requeridas para ejercer el llamado “cuentapropismo”, una de las principales medidas del plan de reformas económicas impulsado por el presidente Raúl Castro.

La ampliación y flexibilización del trabajo privado se ha planteado como una de las alternativas laborales a los despidos masivos en las plantillas estatales “infladas”, otra de las medidas de calado del plan de ajustes del gobierno.

El llamado “reajuste laboral” en las plantillas estatales prevé la eliminación de 500.000 empleos públicos desde 2011 y debía comenzar a aplicarse en enero, pero el Gobierno ha admitido un “retraso” en el proceso.

Raúl Castro dijo recientemente en una reunión del Consejo de Ministros que la eliminación de las abultadas plantillas estatales es una medida que no puede enmarcarse en “plazos inflexibles”.

El gobierno de la Isla prevé que en los próximos cinco años 1,8 millones de trabajadores se incorporen al sector económico no estatal.

El plan de reformas proyectado para superar la grave crisis económica será aprobado a mediados de abril durante el VI Congreso del gobernante y único Partido Comunista, el primero que se celebrará desde 1997.

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