Varios políticos latinoamericanos y españoles descalificaron este martes las elecciones municipales convocadas por el gobierno de Cuba para el próximo día 21, por considerarlas una "farsa electoral" bajo "una dictadura", informó EFE.

"Unas elecciones significa optar, escoger, y eso es lo que no se da en esta farsa electoral", dijo Miguel Tomás López, secretario general de la gubernamental Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), de El Salvador.

López suscribió en Miami, junto con otros líderes políticos y legisladores de Latinoamérica y España, una declaración que condena las próximas elecciones municipales en Cuba, cuyo único objetivo es, dijo, "legitimar a Raúl Castro en el poder".

En opinión de López, se trata de una operación política que tan sólo persigue "enmascarar el traspaso de mando de Fidel Castro a su hermano Raúl".

Subrayó que la declaración de apoyo a "la convocatoria de unas elecciones multipartidistas y democráticas en Cuba" se plantea desde una serie de presupuestos clave, tales como la liberación de todos los presos políticos y la "libertad de expresión, asociación y reunión" en la Isla.

Otros de los firmantes del documento, Pablo Iturralde, diputado del Partido Nacional de Uruguay, insistió en que el "pueblo cubano tiene el derecho a la autodeterminación y a transitar por el camino que elija" libremente, algo que, destacó, no se constata en estos comicios.

"No son elecciones, porque no hay posibilidad de que se presenten varios candidatos", explicó, y apuntó al contenido del manifiesto, en el que se señala que "solamente se presentan candidatos del partido único que reconoce la dictadura: el Partido Comunista de Cuba (PCC)".

En ese sentido, Iturralde instó al gobierno de Cuba a que respete los acuerdos firmados por la Isla en la VI Cumbre Iberoamericana, que se celebró en 1996 en Viña del Mar (Chile).

Lo que comprobamos, resaltó Iturralde, es que La Habana "continúa incumpliendo lo suscrito", no acata nociones fundamentales como el "pluralismo político, el respeto a los derechos humanos, la independencia de poderes y la libertad de expresión", añadió.

Jorge Moragas, responsable de Exteriores del Partido Popular (PP), principal fuerza de la oposición española, y Otto Guevara, presidente del Movimiento Libertario de Costa Rica, estuvieron también entre los firmantes del documento, que denuncia "la violación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos por el régimen cubano".

El texto, expresa apoyo a la disidencia interna en Cuba, que pidió el rechazo de estas elecciones municipales, y defiende las "expresiones cívicas de no cooperación del pueblo cubano y su derecho a manifestarse frente a la opresión".

Los políticos latinoamericanos se sumaron así a una campaña de la oposición interna cubana en contra de la elecciones municipales, que secundan en Miami varias organizaciones del exilio.

Ángel Defana, líder del grupo Plantados, respaldó la premisa de que "no son elecciones (libres), ya que el pueblo no tiene derecho a elegir, sino a votar a quienes" le son impuestos.

Cerca de 45 grupos del exilio participan en una iniciativa que lleva el nombre "Yo no coopero con la dictadura castrista".

La campaña llama a los cubanos a no participar en las actividades convocadas por el régimen, y a no a sumarse al hostigamientos y a los actos de repudio contra opositores.

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