El Museo de Huelva, España, inauguró este martes la exposición “Jorge Camacho. Elogio de los sueños”, que recoge el singular universo creativo del artista cubano caracterizado por la magia, la ensoñación y el simbolismo, informó el rotativo Qué.

El político español Luciano Alonso, consejero de Cultura y Deporte, expresó durante la presentación de la muestra que Jorge Camacho (La Habana, 1934-París, 2011) es “el último de los grandes surrealistas y un luchador incansable por la libertad y la democracia”, según una nota del gobierno regional, citada por el diario.

Se trata, reporta el diario con información de Europa Press, de la primera exposición que se organiza tras la muerte del artista y reúne una parte significativa de creaciones inéditas del artista, fallecido en París el año pasado.

Según explicó Alonso, la muestra presenta la obra “más andaluza” de Camacho, estrechamente vinculado a España, especialmente a Huelva, realizada desde 1975 hasta pocos meses antes de su muerte.

“Elogio de los sueños” constituye un recorrido por las diversas modalidades de expresión artística que legó este exponente del surrealismo, cuyas obras están repartidas por importantes galerías y museos de todo el mundo, asegura el diario.

La muestra se estructura así en varios núcleos: lienzos; papeles con imágenes de agua en movimiento realizadas como homenaje a Leonardo da Vinci; tauromaquias; una reinterpretación de la iconografía maya en dos esculturas cúbicas, una de madera y otra de cristal, y un grupo de tótems, un minucioso trabajo de introspección simbólica que forman la columna vertebral de la exposición. Se completa con un audiovisual de las fotografías que Camacho tomó en Venezuela, en el que abundan pájaros de gran belleza.

Juan Bautista, comisario de la muestra, ha apuntado que Camacho “fue un surrealista esencial, combativo, de profundas e inamovibles convicciones; buscador y creador de mundos imaginarios propios, soñados. Y un gran batallador contra el realismo, de cualquier índole o procedencia, que consideraba como el enemigo más siniestro de la creación pictórica o poética”.

Jorge Camacho salió de Cuba para trasladarse a París en los años 50, y allí residió toda su vida vinculado, entre otros artistas, al fundador del surrealismo, el escritor, poeta y ensayista André Bretón, quien influyó decisivamente en su obra.

Solo dejaba la capital francesa para pasar largas temporadas en Almonte, cuya pinacoteca alberga una sala permanente dedicada a su obra, y donde se zambulló en el universo del Parque de Doñana, que inspiró su pintura y donde destacó por sus conocimientos en ornitología.

La muestra, que se podrá visitar hasta el 30 de noviembre, es una de las propuestas estrellas de la programación del Otoño Cultural Iberoamericano 2012, está patrocina por la Autoridad Portuaria de Huelva y cuenta con la colaboración de la Consejería de Cultura y Deporte española y la Fundación Caja Rural del Sur.

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