El destacado baloncestista cubano, Allens Jemmott, anunció su retiro anticipado por falta de motivación para representar a su provincia (Matanzas) e incluso al equipo Cuba, según una información divulgada este jueves en el diario oficialista Granma.

El atleta, calificado en la nota como “una de las principales cartas de triunfo de nuestro baloncesto”, reconoció que se trata de una decisión “muy dura”, pero se mostró decidido, según sus declaraciones al rotativo.

Jemmott anunció su retiro aludiendo no sentirse “suficientemente motivado” para defender los colores de su provincia, ni como integrante del elenco de Cuba por más de una década.

“Se trata de una decisión muy dura, porque el baloncesto lo significa todo para mí, ninguna otra cosa me interesa tanto, pero tengo que sobrellevar las consecuencias”, declaró el deportista, quien es también, según Granma, militante del Partido y miembro de la Asamblea Provincial del Poder Popular.

El matancero, de 31 años, “líder en la mayoría de los departamentos ofensivos del básquet cubano”, lamentó la situación del baloncesto en la Isla y manifestó sus quejas sobre el estado de las instalaciones en su provincia y la falta de “incentivos” para los deportistas.

La información aparecida en Granma con el título de “Retiro anticipado” dice que el atleta “lamenta que se juegue tan poco baloncesto en el país, el mal estado de las canchas y el escaso fogueo internacional, lo cual incide en el desinterés de no pocos jugadores”.

El deportista se refirió a la caída del techo de la única sala techada (el Ateneo Aurelio Janet) en la provincia de Matanzas, que obliga a que los partidos de la Liga Superior de Baloncesto en Cuba se diriman en una cancha, de la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar Luis A. Turcios Lima, “a donde no va nadie”.

“Allí no va nadie a ver los encuentros, a veces los alumnos están de pase y jugamos sin público, como si estuviéramos entrenando. Eso no incentiva ni estimula a nadie, ni a los locales ni a los visitadores. Y estamos hablando de una provincia donde gusta el baloncesto”.

“El Ateneo era para nosotros el mejor escenario. Siempre se atestaba de público, jugar allí era lo máximo, una verdadera fiesta. Cuando llovía y se mojaba por las filtraciones, los mismos aficionados secaban el tabloncillo para continuar el partido. Ahora duele ver la cancha en el piso, uno se pregunta si rescatarlo es tan difícil para la provincia. ¿Acaso no está en ningún plan para repararla?”

“Pese a todas esas adversidades, el equipo de la provincia clasificó en la última edición de la Liga Superior de Baloncesto y no hubo reconocimiento alguno.”

El diario oficialista informa además que el desalentado atleta podría dedicarse en el futuro a “desarrollar a jóvenes con habilidades” para el baloncesto.

Y que “por ahora, pone término a una rica carrera como atleta, ausencia que notarán especialmente sus seguidores, aquellos que llenaban el Aurelio Janet para admirar su juego con las más elocuentes expresiones de júbilo”, concluye la nota.

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