El cubano Kendrys Morales ya había anticipado el torrente de emociones que lo embargaría cuando volviera al plato por los Angelinos de Los Ángeles por primera vez en casi dos años, reportó la AP.

Después de todo lo que sufrió para regresar al Angel Stadium, el toletero cubano lucía de lo más sereno. “Ponerse nervioso es cosa de chicos”, dijo Morales con una risita.

Aunque el debut del quisqueyano Albert Pujols concentra todo el interés este fin de semana en Anaheim, el regreso de Morales después de recuperarse de una fractura de tobillo también es motivo de festejos.

Morales regresó a la alineación como bateador designado, sexto en el orden, cuando Los Ángeles recibió a los Reales de Kansas City el viernes por la noche en su primer partido de la temporada.

“Siempre tuve pensamientos positivos”, dijo Morales. “Siempre pensé que si me esforzaba, podría volver a donde tenía que estar… Uno lo siente un poco. Uno se emociona porque ha estado alejado durante dos años, pero tiene que controlar sus emociones porque la temporada será larga”, agregó el cubano.

La vez pasada que Morales jugó en las Mayores fue el 29 de mayo de 2010. Ese día se fracturó el tobillo izquierdo cuando saltó al plato para celebrar un grand slam que puso fin al partido. Después de varias operaciones y contratiempos, por fin pudo incorporarse a la pretemporada y jugar con sus compañeros.

El manager de los Angelinos, Mike Scioscia, no vio motivos para demorar el regreso de Morales. Lo incluyó en la alineación inmediatamente, mientras el veterano venezolano Bobby Abreu, que no se encuentra en un buen momento, inició la temporada como suplente.

“Luce tan bien como siempre, de veras”, dijo el jardinero Torii Hunter. “Ha sido un camino arduo para él, pero está regresando a donde estaba y necesitamos su bate. Es un toletero increíble. Espero que la gente no lo haya olvidado”.

Su recuperación se prolongó por varios intentos de regreso fallidos. Al principio creyó que regresaría a finales de 2010, después aseguró que lo haría al comienzo de la temporada pasada, pero su tobillo se resintió de las curaciones rápidas y requirió nuevas operaciones.

Morales considera que ha recuperado sus fuerzas, aunque casi no recuerda esa sensación. Puede batear y correr las bases sin restricciones, y para Scioscia eso es suficiente.

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