AFP/ Nueva York. El toletero cubano Rafael Palmeiro, quien está aún indeciso en cuanto a su retorno a las Grandes Ligas luego de haber dado positivo a los esteroides en la campaña pasada, dijo este miércoles al diario The New York Times que fue "descuidado, estúpido e ingenuo el tomar unas vitaminas contaminadas".

Seis semanas después de haber declarado ante un Gran Jurado del Congreso de Estados Unidos que nunca había tomado sustancias prohibidas, dio positivo a unas pruebas antidroga, por lo que estuvo sancionado 10 días.

"Voy a tomar la responsabilidad, yo fui siempre cuidadoso, pero tomé algo que no sabía si estaba limpio, no tuve completa seguridad en lo que había obtenido", dijo Palmeiro al diario neoyorquino.

"Eso fue un descuido, una estupidez, una ingenuidad al pensar que eso era algo limpio…, algo seguro", agregó Palmeiro.

El cubano, en sus primeras declaraciones sobre la sanción, señaló a The New York Times que aún no ha decidido si regresa o no a los diamantes y sostuvo que lo que le interesa ahora es limpiar su reputación.

De 41 años, Palmeiro es un agente libre que jugó en la campaña anterior con los Orioles de Baltimore. Un panel de jueces en el Congreso no encontró después evidencias de que hubiera mentido bajo juramento.

El antillano ingresó en julio último al Club de los 3.000 hits, y se convirtió en el cuarto jugador en la historia de las Mayores en lograr 3.000 o más hits y 500 o más jonrones (569), detrás de Hanck Aaron, Willie Mays y Eddie Murray.

"Todavía no estoy seguro de regresar", dijo Palmeiro. "Yo amo el béisbol y quisiera jugar siempre, pero hay otras cosas más importantes como la familia", recalcó.

© cubaencuentro