Chávez define como 'petrosocialismo' la ayuda energética a Centroamérica y el Caribe

Hugo Chávez se comprometió el domingo a aumentar la ayuda energética de Venezuela a los países de Centroamérica y el Caribe para afrontar los altos precios del petróleo, en una medida que definió como "petrosocialismo", informó Reuters.

El presidente venezolano ofreció flexibilizar aún más las condiciones de pago para los 85.900 barriles por día (bpd) de crudo y derivados que Venezuela envía a sus 16 socios de Petrocaribe, a los que se acaba de incorporar Guatemala.

"Debemos convertir Petrocaribe en un escudo antihambre, en un escudo para protegernos de la miseria", dijo el mandatario en la Cumbre que se celebró en el occidental estado Zulia, donde definió la iniciativa como "petrosocialismo contra la lógica del mercado".

Bajo los nuevos términos, los miembros podrán financiar el 60 por ciento de su factura energética con Venezuela a un plazo de 25 años, con una tasa de interés fija del 1 por ciento cuando el crudo esté por encima de 100 dólares. La financiación se extenderá hasta el 70 por ciento de la factura si el petróleo llega a superar los 200 dólares.

Hasta la fecha, el acuerdo contemplaba un pago aplazado del 50 por ciento, lo que ha supuesto un ahorro neto para las naciones socias de unos 920 millones de dólares desde que se creó Petrocaribe en 2005, según datos oficiales.

Chávez instó a sus socios a pagar las importaciones energéticas mediante bienes y servicios como "vaquillas, frijoles o servicios turísticos".

"Queremos que al máximo esa deuda sea cancelada de esa manera, con bienes y servicios. Va a nacer un mercado distinto en Petrocaribe", dijo el mandatario, un severo crítico de las políticas de mercado y de Estados Unidos.

En los tres años de operación del mecanismo —cuyos términos suponen un descuento de unos 14 dólares por barril (dpb)—, según el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, Venezuela ha enviado 59 millones de barriles de crudo por un total de 4.700 millones de dólares.

Los críticos del mandatario denuncian que, mediante Petrocaribe y otros instrumentos de cooperación energética similares creados por Chávez, el controvertido mandatario busca impulsar una diplomacia basada en el petróleo, o "petropolítica", para comprar voluntades en América Latina.

Para sus defensores, estos acuerdos son parte de la "revolución socialista" que dice liderar el mandatario, en la que, aseguran, prima la solidaridad frente al "capitalismo salvaje".

"Petrocaribe es un mecanismo de integración orientado al desarrollo que toma en cuenta las circunstancias particulares de economías más pequeñas y busca la complementación", dijo el vicepresidente cubano Carlos Lage, en la plenaria de la cumbre.

Al margen de Petrocaribe, Venezuela envía a Cuba unos 92.000 barriles por día (bpd), que La Habana paga mayoritariamente con el servicio de decenas de miles de médicos y profesionales enviados al país sudamericano.

Venezuela suministra un total de 340.500 bpd bajo convenios de cooperación e integración política a otros países de la región, como Argentina y Bolivia, de una producción oficial de 3,1 millones de bpd.

Petrocaribe está integrada por Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guayana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Venezuela, mientras que Costa Rica acudió a la cumbre como observador.

Chávez acusa a Exxon de robar petróleo venezolano por 'tuberías secretas'

Chávez aprovechó la cumbre para acusar a la transnacional petrolera Exxon Mobil de supuesto robo de petróleo venezolano a través de "tuberías secretas", informó la AP.

"Y tenemos las pruebas para ir a tribunales internacionales (...) Ellos tenían unos campos y los controlaban, sacaban petróleo en la madrugada, (por) tuberías escondidas entre el monte, el gas. Ellos decían que no había gas, y el gas se nos estaban llevando", dijo el mandatario.

Chávez no explicó a qué tribunales recurriría, ni la procedencia de las pruebas, pero aseguró que él y su equipo continúan "acumulando un expediente" de las actividades de la Exxon Mobil, cuando ésta operaba en Venezuela, años atrás.

Exxon Mobil, con sede en Irving, Texas, está en medio de una batalla legal con Caracas luego de la nacionalización en mayo del 2007 de sus proyectos en Venezuela.

La corporación estadounidense presentó en enero ante una corte de Nueva York documentos en los que demostraba que había obtenido un congelamiento de 12.000 millones de dólares en activos mundiales de PDVSA por parte de una corte británica.

Pero a finales de abril un juez británico anuló esa orden.

No obstante, todavía está pendiente el proceso de arbitraje entre la firma estadounidense y PDVSA.

La compañía estadounidense pone en tela de juicio la nacionalización de uno de sus cuatro proyectos de petróleo pesado en la cuenca del río Orinoco, uno de los yacimientos más ricos del mundo.

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