Comienza la Cumbre de Caricom entre el escepticismo y la desilusión

La trigésima segunda Cumbre de Jefes de Estado de la Comunidad del Caribe (Caricom) inició el jueves en San Cristóbal y Nieves con la sensación de una “pérdida de impulso” en el proceso de integración regional y entre el “escepticismo y la desilusión”.

Los líderes regionales reconocen que “se ha perdido el impulso respecto de la agenda de integración regional” y avance en la construcción de este organismo, expresó el presidente saliente de Caricom y primer ministro de Granada, Tillman Thomas.

Esta afirmación de Thomas se produce en un momento de crisis económica global, en que los líderes de los países del Caricom son conscientes de la importancia para la región de dinamizar el proceso de integración de casi cuatro décadas.

“La acumulación de escepticismo y desilusión resultante del déficit de implementación (del proceso de integración) puede minar el progreso hecho en la construcción de la Comunidad del Caribe”, precisó el presidente saliente de Caricom.

Este bloque regional se encuentra sin secretario general desde la cumbre realizada en 2010 en Jamaica, donde Edwin Carrington dejó el cargo después de ejercerlo durante 18 años.

La Cámara de Comercio e Industria de Trinidad y Tobago advirtió recientemente de la urgencia de elegir a un sustituto de Carrington, en momentos en que se han sucedido problemas que “han puesto en tela de juicio el valor y la relevancia del Caricom”.

Tampoco se ha definido, por el momento, cuál será la nueva estructura de gobierno de la organización regional, después de que algunos líderes de la región se quejaron de que la actual ha dificultado el dinamismo en la toma de decisiones.

Caricom también muestra retrasos en implementar el Mercado Común de la Comunidad del Caribe (CSME) y la Corte Suprema de Justicia del Caribe (CCJ).

En ese sentido, Thomas apuntó que Caricom necesita emprender acciones concretas que se materialicen en “beneficios tangibles para la población de la región” y “demuestre el valor del regionalismo para las vidas diarias” de los ciudadanos.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, están entre las personalidades que asistirán a la reunión que terminará el próximo domingo, según los organizadores.

En la agenda figuran, entre otros temas, agilizar la integración económica, la implementación de una política de seguridad regional y también se repasarán los avances en el área de salud.

Denzil Douglas, primer ministro de San Cristóbal y Nieves y quien asumirá la presidencia de Caricom, reconoció recientemente que la cumbre se efectúa en momentos en que el Caribe, cuyas economías se caracterizan por una estructura frágil, luchan por resolver sus finanzas públicas.

El asunto del buen gobierno en el Caricom ha generado un gran debate en el bloque regional, pero mientras tanto “los ciudadanos se sienten cada vez más y más frustrados por lo que ellos perciben como una falta de progreso en la agenda de la comunidad”, señaló un diplomático caribeño en condición de anonimato.

Esta es la primera vez que se celebra una cumbre del Caricom sin el secretario general del organismo.

Irónicamente, Carrington, el último funcionario en ejercer este cargo, asistirá a la reunión de cuatro días, pero en calidad de embajador del Caricom en Trinidad y Tobago.

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