El Congreso Nacional Africano podría perder su dominio en el Parlamento, pero Jacob Zuma ganaría sin contratiempos

Los sudafricanos votaban este miércoles en una elección que presenta la prueba más dura para el gobernante Congreso Nacional Africano (CNA) desde que el apartheid concluyó hace 15 años y que podría debilitar su gran dominio en el Parlamento, informó Reuters.

El CNA tiene virtualmente asegurada una cuarta victoria consecutiva desde que liderado por Nelson Mandela derrotó en 1994 al gobierno de minoría blanca, y se prevé que el Parlamento elija a su líder, Jacob Zuma, como presidente después de la votación.

Zuma enfrentaba cargos de corrupción pero éstos fueron desestimados por un tecnicismo.

El CNA enfrenta un desafío sin precedentes de parte de los partidos de oposición, que esperan capitalizar la frustración de los votantes respecto a la corrupción, pobreza y criminalidad, y podría perder la mayoría de dos tercios que le da el derecho a cambiar la Constitución y afianzar más su poder.

"Estamos entrando a una era post-liberación. La gente está hablando de nuevos temas y desafíos y también hay una nueva generación que no está vinculada con la lucha por la liberación", dijo el analista político independiente David Monyae.

Con poco más de 23 millones de personas en condiciones de votar, una alta concurrencia podría fortalecer la autoridad de Zuma, de 67 años.

"Voté por el CNA por lealtad porque mi padre era activo en la lucha pero no estoy satisfecha con lo que han hecho. La gente esperaba trabajos, y tener comodidad pero todavía están viviendo en chozas", dijo Margaret Nkone, de 57 años.

"No tengo mucha confianza en Zuma pero esperamos que haga un mejor trabajo", señaló en Soweto, un distrito segregado de Johannesburgo que simbolizó la lucha contra el apartheid.

Muchos analistas creen que el partido gobernante —cuyas credenciales contra el apartheid lo convierten en la elección de millones de votantes negros— obtendrá entre el 60 y el 66 por ciento de los votos, en comparación al casi 70 por ciento obtenido el 2004.

"Es un poco más probable que el CNA pierda su mayoría parlamentaria de dos tercios a que la retenga", dijo la consultora Control Risks, estimando las posibilidades en un 55 por ciento contra un 40 por ciento.

Un confiado Zuma, que estuvo en prisión con Mandela, votó en su pueblo natal, Nkandla, en la tierra de su pueblo zulú.

"Cuando estaba creciendo, sabía que este día llegaría", manifestó.

Sus partidarios han calificado las acusaciones de corrupción en contra del líder como una maniobra de sus adversarios políticos.

Un desafío clave para el CNA proviene de un nuevo partido formado por los simpatizantes del ex presidente Thabo Mbeki, quien fue sacado del cargo por el CNA en medio de acusaciones de que se vio involucrado en un caso de corrupción contra Zuma.

Las acusaciones fueron desestimadas por un tecnicismo.

La primera oposición negra creíble para el CNA, el Partido Congreso del Pueblo (COPE, por su sigla en inglés) parece tener algo de apoyo en la creciente clase media sudafricana, pero ha fracasado en su lucha por ganarse a la mayoría pobre.

La Alianza Democrática (AD), que ha resurgido con su nueva dirigente, Helen Zille, ha hecho campaña con un mensaje contra la corrupción.

Mandela, con aspecto frágil a sus 90 años, sonrió mientras fue ayudado a votar en Johannesburgo.

Un funcionario electoral fue arrestado luego de se encontraran votos marcados en una estación de votación, pero no hubo noticias de grandes retrasos o interrupciones en los comicios, en una democracia que es un ejemplo para el resto del continente.

Los colegios electorales cierran a las 21.00 hora local (1900 GMT) y los primeros resultados se esperan para la noche del miércoles.

© cubaencuentro.com