Actualizado: 27/03/2024 22:30
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La esperanza de paz se abre camino tras el 'alto el fuego permanente' de ETA

Un sondeo publicado el viernes mostró que el 80% de los españoles cree que el gobierno debe explorar la vía abierta por el anuncio de la organización.

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La entrada en vigor del "alto el fuego permanente" de la organización terrorista vasca ETA, este viernes, abrió una esperanza de paz y de resolución del conflicto en el País Vasco, tras 40 años de violencia y más de 900 muertos.

El alto el fuego fue acordado en secreto por ETA en enero, según la televisión regional vasca, y habría sido fruto de contactos entre enviados de los socialistas vascos y ETA, especialmente en Ginebra y Oslo, informó la AFP.

El diario español El País, citó fuentes del nacionalismo vasco y dijo que las conversaciones, que tuvieron lugar entre el verano y el otoño boreal de 2005, "se centraron en la búsqueda de las condiciones para que la organización terrorista declarase el 'alto el fuego permanente"'.

"Facilitadores de una organización internacional" ampararon los encuentros, según El País.

El diario agregó que, tras los contactos en Ginebra durante el verano, se produjo otro en Oslo, en noviembre, en el que se confirmó la decisión de ETA de declarar el alto el fuego, aunque la banda se reservaba la fecha en la que realizaría el anuncio.

A pesar de que la entrada en vigor del "alto al fuego permanente" ha permitido empezar a creer en el "principio del fin" de ETA, al que se había referido hace algunas semanas el jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, la prudencia sigue marcando los pasos de los políticos y del gobierno.

"Hay que aguardar a que las palabras den paso a los hechos, porque las palabras no bastan", advirtió la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega.

El Ministerio del Interior español descartó, además, retirar por ahora, la escolta que protege a un millar de personas amenazadas por ETA, a pesar de que muchos comentaristas creen que esta vez es la buena, en razón de varios puntos inéditos de la declaración de la organización armada vasca.

En su mensaje, anunciado el miércoles y completado al día siguiente, ETA habló de "alto el fuego permanente", frente a los términos anteriores de "tregua", en 1989, o "alto el fuego ilimitado", en 1998; tampoco hizo referencia explícita a la independencia del País Vasco, sino que mencionó los "derechos" del "pueblo vasco".

La organización dijo querer abrir un "proceso democrático" al término del cual "los ciudadanos vascos deben tener la palabra y la decisión sobre su futuro".

"La decisión que los ciudadanos vascos adoptemos sobre nuestro futuro deberá ser respetada", añadió ETA, comprometiéndose a acatar el resultado de un futuro referéndum en el País Vasco.

Sin embargo, el presidente del Consejo de Estado español, Francisco Rubio Llorente, consideró este viernes imposible e "inconcebible" hacer una consulta a un "colectivo que no está definido por la ley".

Además, "en España no se puede plantear un referéndum que implique una reforma constitucional si en ese referéndum no participa todo el pueblo español", agregó en una entrevista publicada en el diario Expansión.

Rodríguez Zapatero realizará consultas con los partidos políticos para intentar lograr un consenso en la línea de la hoja de ruta aprobada en mayo de 2005 por el Parlamento español, que lo autorizaba a abrir "un diálogo" con ETA si la banda terrorista mostraba "su voluntad" de abandonar las armas.

El presidente del gobierno previsiblemente no lo tendrá fácil con el Partido Popular (PP, derecha), que votó contra esa resolución parlamentaria.

Un sondeo publicado el viernes mostró que el 80% de los españoles cree que el gobierno debe explorar la vía abierta por el anuncio de ETA. Una cifra aún mayor considera que el PP (principal partido de la oposición) debe apoyar al Ejecutivo en esa materia.