Manifestantes en Florida protestan contra ley de Inmigración

Cientos de manifestantes de diversas zonas de Florida se concentraron el lunes en la Asamblea Legislativa estatal para protestar contra un proyecto de ley de Inmigración cuyo debate fue aplazado en el pleno del Senado.

Desde Miami viajaron a Tallahassee, capital del estado, estudiantes, trabajadores agrícolas y activistas pro inmigrantes para pedir a los legisladores que no aprueben el proyecto SB 2040.

En la manifestación participaron también personas de Tampa, Orlando y Gadsden, quienes portaban banderas estadounidenses, pancartas con lemas “Yo soy Florida” y entonaron el himno de Estados Unidos.

El proyecto, presentado inicialmente por la senadora cubanoamericana de Miami Anitere Flores, exige a las empresas usar el programa federal de verificación del estatus migratorio de los trabajadores, E-Verify, y el incumplimiento podría conllevar a la suspensión de la licencia de las compañías.

Mike Haridopolos, presidente del Senado, informó que se aplazó la discusión posiblemente hasta el martes debido a que el proyecto contiene mucho “vocabulario técnico y queremos asegurarnos de que todos los legisladores sepan exactamente qué es lo que votarán”.

El senador, quien opta para un escaño similar en el Congreso federal, ha dicho que quiere que el proyecto incluya acciones para deportar a los indocumentados convictos de delitos.

El Comité del Presupuesto planeaba analizar el proyecto, pero Haridopolos anunció la semana pasada que sería sometido directamente al pleno del Senado lo más pronto posible.

Una decisión que fue criticada por la Coalición de Inmigrantes de Florida (FLIC), uno de los varios grupos de activistas que han organizado manifestaciones en contra de proyectos de ley de Inmigración que consideran son similares al polémico marco legal de Arizona y afirman que criminalizarían a los inmigrantes.

“El presidente del Senado finalmente reconoce que él es el único interesado en esta ley que nadie más quiere en Florida. Al empujarla, está ignorando las voces de oposición de miles de residentes de la Florida, líderes empresariales y religiosos, e incluso de los legisladores latinos de su propio partido”, dijo María Rodríguez, directora ejecutiva de la FLIC.

Agregó que “esto es una bofetada para los latinos y para toda Florida en general. Ahora está claro que esto no se trata de qué políticas son buenas o malas para Florida. El Presidente del Senado está dispuesto a arriesgar el futuro de Florida a cambio de sus ambiciones políticas”.

Los activistas han advertido de las consecuencias que tendría una ley de Inmigración para la golpeada economía de Florida, que depende en gran parte de los ingresos del turismo y de la agricultura, dos sectores con gran presencia de trabajadores inmigrantes.

“¿Cómo pueden los conservadores fiscales aprobar una ley sin saber cuánto va a costar a los contribuyentes? Nuestro análisis dice que las leyes de inmigración podrían costar a Florida alrededor de 45.000 millones de dólares”, dijo Subhash Kateel, coordinador estatal de la campaña Somos Florida.

Por su parte, Tomás Regalado, alcalde de Miami, afirmó que hay preocupación sobre los proyectos de ley que fueron presentados en el Congreso estatal.

“Hemos escuchado las preocupaciones de las personas de Miami. Nuestros residentes y empresarios temen que esas leyes creen una división entre la comunidad local y dañen la imagen de Miami como una ciudad que le da la bienvenida a los turistas”, dijo Regalado.

Añadió que el país está todavía esperando por un debate sobre inmigración y que el gobierno federal “no ha tomado total responsabilidad por este asunto, pero este no es el momento o no es la mejor manera de actuar sobre el tema inmigratorio”.

© cubaencuentro.com