Trump a golpes contra la prensa, en Twitter

En ese nuevo estilo que acaba de definir el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, estalló una nueva polémica la mañana del domingo por un mensaje de Twitter, informa la BBC.

Se trata de un tuit con un videoclip de 28 segundos en el que golpea a un hombre, cuya cara fue cambiada por el logotipo de la cadena de noticias CNN, en un escenario de lucha libre.

El vídeo original es de 2007, cuando Trump participó en un espectáculo de la World Wrestling Entertainment (WWE) en el que “golpea” al entonces CEO de la franquicia, Vince McMahon.

Mientras que el presidente de Estados Unidos defiende su libertad de publicar este tipo de mensajes, parte de la prensa de Estados Unidos denuncia el comportamiento del líder de uno de los países más poderosos del mundo.

Unas horas antes del mensaje con el video, Trump había dicho que estaba pensando en cambiar el sobrenombre de “Noticias Falsas CNN” por “Noticias Fraudulentas CNN”.

El Presidente se ha ocupado de criticar durante varios días el hecho de que CNN tuvo que retirar un reportaje de la serie de investigaciones que esa cadena y otros medios han hecho de los presuntos vínculos de Trump con Rusia.

El artículo ligaba a Anthony Scaramucci, un asesor presidencial de Trump, con el director del Fondo Ruso de Inversión Directa, Kirill Dmítriev.

Tres periodistas renunciaron a CNN y la empresa informó que eliminaba el reportaje porque no cumplía con sus estándares periodísticos, algo que fue criticado por Trump y en foros de sus simpatizantes.

CNN ha sido uno de los medios más criticados por Donald Trump desde su campaña presidencial.

Para CNN, el comportamiento del Presidente en sus redes sociales es impropio e incita a que sus seguidores asuman una actitud violenta en contra de la prensa.

“Es un día triste cuando el presidente de Estados Unidos alienta a la violencia contra los periodistas”, señaló la cadena en un comunicado.

“En lugar de prepararse para su viaje al extranjero, su primera reunión con Vladimir Putin, liderar con Corea del Norte y trabajar en su proyecto de ley de salud, está involucrado en un comportamiento juvenil muy por debajo de la dignidad de su cargo”, decía la nota de prensa.

El video no solo fue compartido por Trump en su cuenta personal, sino que también en la cuenta presidencial oficial manejada por la Casa Blanca.

Donald Trump ha demostrado una y otra vez que ve la política como arte de actuación, como otro reality show en el que mientras más drama y conflicto haya, mejor.

Su video de lucha libre con CNN es el ejemplo más sobresaliente. Para Trump, el proceso político es como un encuentro de la World Wrestling Entertainment (la empresa de lucha libre de EEUU). La trama es artificial, la acción es falsa, el resultado predeterminado.

Durante su campaña, levantó la cortina de su espectáculo y se rio junto a sus partidarios. Pidió a sus multitudes que animaran al héroe (él) y abuchearan a los villanos (todos los demás).

Como presidente, nada ha cambiado.

CNN acaba de ser elegido como el villano más reciente.

El tuit del Presidente ciertamente envileció el nivel del discurso en la nación. Ya hay acusaciones que Trump está incitando a la violencia.

La mayoría de sus partidarios, sin embargo, verán esto como probablemente Trump lo hace: el último episodio del programa de televisión que más ha golpeado la escena política de Estados Unidos.

Desde el sábado, el presidente hizo una aclaración en Twitter: “Mi uso de las redes sociales no es presidencial”, haciendo referencia a la manera tradicional de hacer política en EE.UU.

“Es de la presidencia moderna”, lanzó el presidente.

Y es que el mandatario no solo ha expresado su descontento con la cobertura de CNN, sino también ha atacado a periodistas de otras cadenas, como Mika Brzezinski y Joe Scarborough de MSNBC.

Otros medios han expresado las preocupaciones por el comportamiento del presidente.

“Creo que es indecoroso que el presidente ataque a los periodistas por hacer su trabajo y aliente así el enojo contra los medios de comunicación”, dijo Dean Baquet, editor ejecutivo de The New York Times.

El Comité para la Protección de Periodistas de EEUU también expresó su rechazo.

“Apuntar contra periodistas o medios de comunicación, tanto en internet como fuera de línea, crea un efecto escalofriante y fomenta un ambiente en el que se considera aceptable que haya un mayor acoso o incluso un ataque físico”, dijo Courtney Radsch, su directora.

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