Uribe acepta la propuesta de cese al fuego 'experimental y transitorio' del ELN

AFP/ La Habana. El gobierno de Colombia aceptó el cese al fuego experimental y transitorio propuesto por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), inyectando vigor a unas frágiles y escabrosas conversaciones que este miércoles cumplieron su segunda jornada en La Habana, en busca de un proceso de paz.

El comisionado de paz del gobierno de Colombia, Luis Carlos Restrepo, informó que el presidente Álvaro Uribe le pidió comunicar a los negociadores del ELN en esta sexta ronda de diálogos que el gobierno acepta "la propuesta de que el cese sea experimental y transitorio".

"El gobierno acepta el planteamiento de un cese de hostilidades experimental y transitorio. Insistimos en la verificación y para que haya verificación se necesita ubicación territorial, pero somos flexibles y estamos dispuestos a construir fórmulas alternativas con ellos", afirmó.

El comandante Pablo Beltrán, negociador del ELN, anunció el lunes la oferta pero reiteró que el grupo ilegal armado rechaza que sus efectivos sean concentrados en zonas para la verificación del alto al fuego, porque a su juicio sería un "suicidio".

"Si el ELN está pensando en fortalecerse eso no le convendría, pero como estamos en un proceso de paz. Hay que tomar una decisión en cuanto al paso de las armas a la política", comentó Restrepo.

El grupo armado también reiteró el lunes su exigencia de que el cese de hostilidades sea "bilateral" y que las Fuerzas Armadas suspendan "operaciones ofensivas". El gobierno dijo que ofrece acciones de "reciprocidad".

"Una vez que el ELN suspenda acciones violentas, suspendidos los secuestros y liberados los secuestrados en poder de este grupo, el gobierno inmediatamente cesa todo tipo de acción militar ofensiva contra ellos", aseveró Restrepo.

En declaraciones a la AFP, Beltrán consideró "interesante" que el gobierno aceptara la oferta, sin embargo consideró necesario que se sume a lose diálogos una delegación del Ministerio de Defensa para discutir cómo sería la verificación, además de la "reciprocidad" o "bilateralidad".

Beltrán advirtió que apenas empieza la discusión de los temas de ambiente de paz, participación de la sociedad, de la comunidad internacional y reconocimiento del ELN. "Si en el acuerdo global de cuatro puntos logramos avanzar en todos, no solo en uno, creo que esto sale adelante", dijo.

El ELN pide soluciones al desplazamiento forzado por la violencia, reformas políticas y sociales, una convención sobre problemas nacionales y garantías jurídicas para sus miembros.

Según Restrepo, el gobierno daría "garantías" para que los rebeldes permanezcan en zonas acordadas "sin ser capturados" y puedan también desplazarse por el país y "hacer sus planteamientos".

"Declarado el cese de hostilidades, el gobierno da todas las garantías para que convoquen un congreso de su organización y ojalá fuese el primero público para que tomen decisiones en cuanto a su reinserción a la civilidad", añadió.

El consejero de paz explicó que también el alto al fuego estaría acompañado de soluciones al problema del desplazamiento forzado y la ejecución de programas de desminado.

Esta ronda, la sexta desde que en diciembre de 2005 el gobierno de Uribe y el ELN comenzaron diálogos exploratorios de paz, fue instalada el martes tras una lluvia de reproches mutuos y en un clima de desconfianza, situación que Beltrán calificó de "crítica".

"Yo creo que esto es crítico desde el día que se inició. Durante todos estos meses las conversaciones han sido difíciles", dijo Restrepo, quien compara su labor con la de un médico en una sala de cuidados intensivos.

Estimó entonces fundamental que haya testigos, que en esta ronda es el sacerdote Darío Echeverri, representante de la Conferencia Episcopal Colombiana, pero podrían ser internacionales en la fase de conclusiones.

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