Polonia

El pasado, ¿lección o revancha?

La última 'cacería de brujas' patrocinada por los hermanos Kaczynski.

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De esta manera, las relaciones de Varsovia con Bruselas se han enfriado, así como con sus vecinos más allegados. Por ejemplo, el presidente Kaczynski dejó plantados a sus colegas de Francia y Alemania el pasado 3 de julio, fecha en que tenían programada celebrar una Cumbre, alegando que se sentía indispuesto.

Pero la prensa polaca dijo unánimemente que el presidente no había asistido porque se había puesto furioso debido a las satíricas críticas que un día antes fueron publicadas por el diario alemán Die Tageszeitung, donde se le comparó con una "patata".

En lugar de asistir a la Cumbre, Lech Kaczynski confirmó que Polonia mantiene su alianza con Estados Unidos y que su país "no es una nación de desertores". En cambio, hizo declaraciones reprochando a Bruselas que debía respetar los valores católicos tradicionales de Polonia.

Ley y Justicia encabeza desde la primavera de 2006 una coalición de mayoría integrada por el partido agrario populista Partido de Auto Defensa y el partido nacionalista de extrema derecha Liga para la Auto Defensa de la Familia Polaca. Los dos líderes de estas agrupaciones, Andrzej Lepper y Roman Giertych, ocupan el puesto de viceprimer ministro en el actual gobierno. Estos dos partidos también se oponen al estatus de Polonia como miembro de la Unión Europea.

¿Qué es el Instituto Nacional de la Memoria Polaca?

Fue creado en diciembre de 1998 para reunir y administrar los expedientes de la policía secreta del período entre 1939 y 1989, los 50 años más trágicos de la historia moderna polaca, con el objeto de investigar los crímenes nazis y comunistas, encontrar a los culpables vivos o muertos y esclarecer los hechos a fin de educar a los jóvenes. Esos archivos, colocados en fila, harían una hilera de 95 kilómetros de largo.

Su fundador, el doctor León Kieres, dijo a Encuentro en la Red que "estos archivos están sirviendo para tres cosas: estudiarlos y buscar a los culpables de delitos si los hay; dárselos a leer a toda persona mayor de edad que lo solicite (menos los ex miembros de la seguridad) y rescribir la historia para educar a los jóvenes". La historia fue falsificada, desfigurada. La tarea del Instituto de Memoria Nacional es buscar la verdad para el futuro.

Kieres fue perseguido durante el comunismo. Estuvo en la cárcel, su mujer perdió su puesto, no podían viajar al extranjero. En los años ochenta se hizo miembro de Solidaridad y la policía obligó a la universidad a despedirlo.

¿Qué siente un hombre cuando se entera que en el pasado perdió su trabajo y tuvo que ir a la cárcel porque sus amigos y colegas le denunciaron? ¿O cuando sabe la identidad de aquellos que fabricaron en su contra evidencias falsas o testificaron por miedo u obligados por la policía secreta?

El aspecto sentimental de esta tragedia no debe impedirnos comprender que lo principal es rescatar la verdad, saber cómo fue el pasado, que los crímenes no queden impunes, que podamos rescribir la historia y que los jóvenes la conozcan. Y admite: 'Pero no voy a negar que es una tarea terriblemente dolorosa'.