El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, regresó a su país el sábado, tras unas horas de visita a Cuba junto a la madre de la política colombo-francesa Ingrid Betancourt, en las que se entrevistó con Fidel Castro, informó la AFP.

"Estaba contento, eufórico de aquella batalla por la paz y su papel —reconocido por los cables internacionales— lo hacía feliz", dijo Castro en un artículo de prensa sobre los resultados de la reunión del Grupo de Río realizada el viernes, en República Dominicana.

Castro opinó que su amigo y principal aliado político estuvo "sereno, persuasivo, conceptuoso y de excelente humor" en la cumbre que puso fin a la crisis entre Quito, Bogotá y Caracas, desatada tras la incursión del ejercito colombiano en territorio ecuatoriano para eliminar al número dos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Raúl Reyes.

Chávez y Yolanda Pulecio, madre de Ingrid Betancourt —rehén de las FARC desde hace seis años—, en compañía de la senadora colombiana Piedad Córdoba, fueron recibidos la noche del viernes por Raúl Castro en el aeropuerto internacional de La Habana, tras participar en la cumbre de Santo Domingo.

Raúl Castro saludó con abrazos a Chávez, Pulecio y Córdoba, quienes también fueron recibidos por el vicepresidente Carlos Lage, el canciller, Felipe Pérez Roque, y el vicecanciller Bruno Rodríguez, según imágenes de la televisión oficialista de la Isla.

Las FARC afirman que en el momento en que fue abatido, Reyes buscaba una reunión con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para resolver la situación de Betancourt, quien se encuentra muy enferma.

Chávez y Córdoba han intercedido ante las FARC para la liberación de varios rehenes y, el viernes, el ministro del Interior de Venezuela, Ramón Rodríguez Chacín, dijo que el mandatario venezolano sigue trabajando por la liberación de Betancourt, ex candidata presidencial secuestrada en febrero de 2002

El gobierno cubano no informó el objetivo de la presencia de Pulecio en Cuba. La Isla ha sido sede de diálogos entre Bogotá y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el segundo grupo ilegal armado en importancia de Colombia, detrás de las FARC.

Castro escribió la semana pasada varios artículos referidos a la crisis entre Ecuador y Colombia, a la que se sumaron Venezuela y Nicaragua, pero en ninguno criticó al gobierno del presidente colombiano Álvaro Uribe, sino que responsabilizó a Washington.

En su texto del sábado, que publicó la prensa de la Isla el domingo, Castro dijo que se reunió con su amigo venezolano porque "Raúl lo había invitado" a visitar la Isla.

Chávez "dijo que no quería verme para no contagiarme con el virus de la gripe. Puros pretextos para no someterse a la tortura de mis preguntas habituales", relató Castro, informó EFE.

"¿Para qué tomo la vitamina C? —le mando a decir. ¿Acaso se van a enfermar todos los jefes y jefas de Estado que estaban en la calurosa y feliz reunión final del Grupo de Río?", agregó.

"Hablé largo con Chávez hoy sábado. Somos como hermanos. No puedo decidir la publicación de los temas abordados; nunca lo hice ni lo haré. Venezuela no es igual que Brasil. En las memorias publicaré lo que él me autorice. Sólo puedo afirmar que la reunión fue excelente. Y todavía no he sentido los efectos de la gripe", dijo Castro en su artículo.

El ex gobernante consideró que Estados Unidos fue "el único perdedor" de la crisis sudamericana, pues —según él— pretendía provocar una guerra entre latinoamericanos.

"A pesar de las profundas diferencias ideológicas y tácticas, todos (los presidentes) brillaron", dijo sobre la Cumbre del Grupo de Río.

Al término de su corta visita, Chávez declaró a la prensa que Castro estaba "muy feliz por el gran triunfo de Santo Domingo y como él mismo dijo, el gran derrotado: el imperialismo".

"Me decía Fidel que hemos demostrado que somos capaces de enfrentar y solucionar nuestros propios problemas", dijo Chávez, quien fue despedido por Raúl Castro.

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