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Reformas, Cuentapropismo

El Cabildo, un próspero negocio privado en La Habana

Está ubicado en un barrio residencial de La Habana y cuenta con un teatro al aire libre, bar y restaurante con 150 sillas. El centro ofrece un espectáculo nocturno animado por un grupo ecléctico denominado “Ópera de la Calle”

Un grupo de artistas cubanos con bailarines al estilo Broadway y clásicos cantantes de ópera abrieron El Cabildo, un centro cultural que está acelerando el ritmo de las reformas económicas en la Isla, informa Reuters.

Según el reporte, el club de 130 empleados sería la mayor empresa privada de la ciudad y quizás un adelanto de lo que podría suceder en el país, donde están creciendo este tipo de negocios a raíz de las medidas puestas en marcha por Raúl Castro para impulsar la economía y sacar a flote el sistema socialista.

El Cabildo está ubicado en un barrio residencial de La Habana y cuenta con un teatro al aire libre, bar y restaurante con 150 sillas, señala Reuters. Su éxito es visto como un retorno a la vida antes de la revolución de 1959 en Cuba, cuando la capital estaba repleta de cabaret y teatros.

El centro ofrece un espectáculo nocturno animado por un grupo ecléctico denominado “Ópera de la Calle”, que mezcla la ópera tradicional con música y bailes cubanos, así como música popular extranjera.

El ritmo de discoteca reina los domingos, mientras que cuatro tenores actúan otras noches dedicadas a la ópera.

El Cabildo fue construido sobre las ruinas de un edificio derrumbado y su estructura incluye partes de las desmanteladas instalaciones portuarias de La Habana. Un techo de hojas de palma (guano), el árbol típico de Cuba, cubre parte del lugar.

Cuba, recuerda el reporte, ha tenido siempre una activa vida nocturna con teatro, discotecas y música, incluyendo el famoso cabaret Tropicana, que es popular entre los turistas.

Sin embargo los artistas han trabajado tradicionalmente para el Estado, con la excepción de un selecto grupo de artistas y músicos a los que se les ha permitido trabajar por su cuenta, señala Reuters.

Resultado de la iniciativa de un emprendedor

“El Cabildo es el resultado de la iniciativa de un emprendedor, Ulises Aquino, un cantante de 50 años que fundó la “Ópera de la Calle” en el 2006 y estaba buscando una sede para su grupo. Cuando el presidente Castro anunció algunas medidas dos años atrás, decidió aprovechar la oportunidad para formar su empresa.

Una de las reformas anunciadas para incentivar el desarrollo municipal animó a las autoridades locales a promover sus propias ideas, en lugar de esperar al Gobierno central.

En el 2011 Aquino, cuyo grupo actuaba en rudimentarias condiciones e incluso en las calles, convenció a las autoridades locales del municipio Playa, de que le permitieran utilizar los restos de uno de los muchos edificios derrumbados de la zona.

Aquino transformó los escombros en la sede permanente del grupo.

“Es la política del país que apoya este tipo de fenómeno que ocurre y que el artista, el obrero o el campesino pueda lograr poner en función sus propios medios de producción para lograr los objetivos sociales que persigue la nación”, dijo Aquino recientemente en la sede de El Cabildo.

El cantante mantuvo su compañía a flote financieramente mediante contrataciones en el extranjero y actuando en centros turísticos, lo que lo convirtió en experto en trabajar dentro del sistema cubano.

Si bien las reformas han animado la iniciativa privada, llegan con restricciones para evitar que Cuba vuelva a una sociedad dividida entre ricos y pobres.

Aquino mezcla la iniciativa individual con actuaciones para la comunidad, como espectáculos gratuitos los fines de semana para niños, al tiempo que mantiene ofertas con precios asequibles.

Los nuevos empresarios en la Isla deben obtener una licencia para ejercer sus negocios y los restaurantes privados deben cumplir con un límite máximo de 50 asientos.

Aquino obtuvo una licencia por un límite de unos tres restaurantes, lo que lo habilitó a instalar 150 sillas. También posee permiso de trabajo como “un “organizador de eventos y otras actividades”.

Utilizando esta última modalidad, planea ampliar el negocio para ofrecer paseos en barco por el Almendares, el río que desemboca a un lado de “El Cabildo.

Cuba tiene 387.000 trabajadores en el sector no estatal, la mayoría de los cuales poseen pequeños negocios en sus viviendas, según datos oficiales.

Buenos salarios y altos costes

Aquino tiene 60 intérpretes y 26 personas de apoyo en la “Ópera de la Calle”, además de otros 43 empleados en el bar y el restaurante.

Todos ellos reciben entre 1.800 y 2.000 pesos al mes, un salario cuatro veces superior al promedio de Cuba de 450 pesos, o 19 dólares, según dijo.

Este empresario paga alrededor de 20.000 pesos (833 dólares mensuales) por sus licencias y los impuestos sobre las ventas, pero aún desconoce las tarifas sobre la renta que deberá pagar anualmente.

Los costos de funcionamiento son altos debido a que, al igual que otros propietarios de negocios privados, tiene que comprar los alimentos, bebidas y otros insumos en las tiendas estatales a precios minoristas.

Una queja común es que el Estado proporciona bienes a precios mayoristas para las empresas del Gobierno, pero todavía no lo ha hecho extensivo al sector privado.

La gran mayoría de los clientes de El Cabildo es cubana y pagan 50 pesos la entrada, equivalente a dos dólares, mientras que los turistas pagan 10 dólares de domingo a jueves y 25 dólares por el programa cultural de los fines de semana.

Según Rafael Betancourt, un experto en desarrollo local de la Asociación Nacional de Economistas de Cuba, se están desarrollando otros proyectos similares de entretenimiento privados, lo que muestra la importancia que la iniciativa individual desempeña en la construcción del futuro de Cuba.

“Hay muchos artistas que quieren hacer proyectos como este. El Cabildo es solo el comienzo”, dijo.

© cubaencuentro

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