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Chepe, Cuba, Economía

Chepe presente y en la memoria

CUBAENCUENTRO brinda aquí algunos testimonios, a los que pueden sumarse otros en los próximos días, de aquellos que han compartido estas páginas digitales con el destacado economista y disidente cubano, que el lunes falleció en Madrid

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Desde que comenzó la revista impresa Encuentro de la Cultura Cubana, a la que se agregó luego Encuentro en la Red, Oscar Espinosa Chepe fue un colaborador constante. Luego, con la aparición de Cubaencuentro, tanto Chepe como quien es ahora su viuda, Miriam Leiva, han colaborado asiduamente con esta publicación. Incluso en una época, y hasta el momento en que los problemas de salud de Chepe vinieron a impedir que nos pudiera seguir brindando sus textos, todas las semanas aparecían artículos de ambos. Durante todo ese tiempo, lograron ese extraño milagro de un matrimonio que comparte puntos de vista, intereses y actitudes, pero que a la hora de escribir logra hacerlo con una independencia absoluta uno de otro.

A continuación, y a manera de homenaje, algunos testimonios de reconocimiento, recuerdo y admiración hacia un colaborador que siempre se caracterizó por su modestia, integridad y sabiduría:

Oscar Espinosa Chepe fue uno de los economistas cubanos mejor informados y más corajudos. A pesar de las dificultades de acceso al internet, siempre estaba al día en las publicaciones de organismos internacionales y regionales, y sus trabajos eran documentados y objetivos. Su crítica se basaba en publicaciones y cifras oficiales, pero también criticaba el embargo de EEUU como un instrumento que había sido incapaz de terminar el sistema, mientras que era utilizado por el gobierno como chivo expiatorio de sus fallas económicas. Para mí Chepe siempre fue una fuente de inspiración, sus artículos son citados abundantemente en mis propias publicaciones y tuve el honor de escribir el prólogo a dos de sus libros. Cuando salió de la prisión en Cuba, debido al mal estado de su salud, logré que dos decenas de economistas prestigiosos de todo el mundo firmaran una carta dirigida al Jefe de Gobierno de España solicitando su salida, pero al final Chepe decidió quedarse escribiendo en la Isla. Ofreció su vida y su salud por Cuba. Nos conocimos personalmente en La Habana en 2010 y me sorprendió el pequeñísimo y modesto apartamento en que él y Miriam habitaban, repleto de libros, revistas y papeles, casi sin dejar espacio para el vivir diario. Era un hombre sencillo, frugal y amable que amaba mucho a su patria. Pude verlo en Madrid el pasado junio y residía con Miriam en una habitación minúscula de una pensión. Aunque estaba ya muy enfermo asistió a la presentación de mi libro en Casa de América y le rendí públicamente mi último tributo. Lo vamos a extrañar mucho.

Carmelo Mesa-Lago. Catedrático Emérito de Economía y Estudios Latinoamericanos, Universidad de Pittsburgh.


A pesar de que convivimos tanto tiempo en una isla tan pequeña, nunca conocí personalmente a Oscar Espinosa Chepe. Hubiera sido para mi un honor y una oportunidad, sobre todo desde que en una noche de insomnio en un avión rumbo a Madrid, lo descubrí en uno de sus incisivos artículos en la fenecida revista Encuentro.

Desde entonces lo he leído fielmente. Y cada vez me han gratificado la agudeza del analista y la consecuencia del demócrata, pero sobre todo la integridad del intelectual. A pesar de haber pasado varios años de cárcel por no hacer otra cosa que pensar bien y diferente, Chepe nunca permitió que sus emociones pasaran por encima de su profesionalidad. Y eso lo convierte en una de esas figuras intelectuales que está llamada a permanecer en el largo plazo. Y por eso, lo seguiremos leyendo por mucho tiempo para bien de la nación próspera, equitativa y democrática que preconizó.

Dr. Haroldo Dilla Alfonso. Sociólogo y historiador.


Oscar Espinosa Chepe fue una persona convencida de lo que hacía en la vida, sin oportunismos extremistas ni falsos remordimientos de su etapa “revolucionaria” desde su más temprana juventud. Persona íntegra, al hablar o escribir no se preocupaba de lo que le gustaría escuchar o leer a sus jefes (cuando los tenía), o, tras romper con el régimen, a los opositores y exiliados, sino en los análisis que resultaban necesarios para comprender la realidad cubana. Su virtuosismo didáctico hacía parecer fácil y sencillo cualquier tema que abordara, pero el rigor del análisis y la profundidad de sus conclusiones mostraban al profesional comprometido con la búsqueda de la verdad. Como economista, periodista independiente y opositor, es un ejemplo para todos los cubanos a ambas orillas del Estrecho de La Florida.

Eugenio Yáñez. Escritor y columnista, edita Cubanálisis-El Think-Tank.


Dos cualidades, entre otras, siempre destacaban en los artículos de Chepe que aparecían habitualmente tanto en Cubaencuentro como en otras publicaciones, como El Nuevo Herald.

Una es que lograba el difícil equilibrio que le permitía presentar un artículo o un análisis balanceado, pero donde al mismo tiempo dejaba claro su punto de vista. Y para ello siempre se fundamentaba en datos y reflexiones que estaban libres de criterios altisonantes, la demagogia al uso y el oportunismo político.

La otra cualidad era el uso de los propios datos suministrados por el gobierno cubano, apoyados por otros de organismos internacionales, para sustentar sus análisis. Así nunca cedió al socorrido recurso de que toda la información procedente de la Isla es falsa, un argumento en que puede haber cierta verdad pero también que lleva a un negativismo fácil y complaciente con ciertos sectores del exilio. No es que Chepe creyera todo lo que decía el régimen, sino todo lo contrario. Pero sabía qué cuestionarse y cómo. En este sentido, él y el profesor Mesa Lago han sentado cátedra, y logrado sacar información valiosa donde otros se negaban a mirar.

En lo personal, y durante el tiempo que tuve el gusto de editar sus trabajos en CUBAENCUENTRO, además de un honor siempre fue un placer contar con un intelectual tan preciso, tanto en las cifras que brindaba como en la redacción y la ortografía. Todo ello hecho con una modestia absoluta. Era eso que se dice rápido, pero resulta casi imposible de encontrar: un ejemplo.

Alejandro Armengol. Periodista. Director editorial Cubaencuentro.


Este es el último artículo de Oscar Espinosa Chepe publicado en CUBAENCUENTRO:

“Nosotros el pueblo”

Otros artículos de Chepe:

El año de la incertidumbre

Un censo con menos cubanos y cifras controvertidas

Para ver todos los artículos de Oscar Espinosa Chepe, haga clic aquí.


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