Ministro de Exteriores checo se encierra en una celda simbólica en apoyo a los disidentes cubanos
Este sábado se realizará en Praga una marcha de respaldo a las Damas de Blanco.
El ministro de Asuntos Exteriores de la República Checa, Cyril Svoboda, se dejó encerrar este viernes simbólicamente en una celda situada en una céntrica plaza de Praga, para denunciar la situación de la disidencia interna en Cuba tres años después de la oleada represiva que llevó a prisión a 75 opositores en la Isla, informó EFE.
A la actividad asistieron también el alcalde de Praga, Pavel Bem, el presidente del Partido Democrático Ciudadano (ODS), Mirek Topolanek, y el director de la ONG People in Need, Simon Panek, entre otras personalidades.
En este tercer aniversario de la detención de los opositores cubanos, se organizó una manifestación delante de la embajada de La Habana en la capital de la República Checa, a la que asistieron 50 personas y en la que se leyó una carta abierta a Fidel Castro denunciando la situación de los más de 300 presos políticos de la Isla.
"El castigo por expresar libremente sus ideas fue siempre, es y será inmoral e inaceptable", leyó Jiri Knitl, miembro de People in Need, que envía regularmente a la Isla pequeñas cantidades de dinero para las familias de los presos políticos y medicinas.
En el acto asistieron antiguos disidentes checos, como el ex ministro de Interior Jan Ruml o la actriz y diputada Tana Fisherova, quien viajó recientemente a Cuba.
Este sábado se realizará una marcha pacífica por el centro de la capital checa para homenajear a las Damas de Blanco —madres, esposas, hijas y hermanas de presos políticos cubanos, galardonadas por el Parlamento Europeo con el Premio Sajarov 2005— que finalizará con una ceremonia religiosa en la Iglesia de San Havel.
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