Observatorio de Derechos Humanos
Observatorio de Derechos Humanos denuncia el acoso a los disidentes en Cuba
El Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos denunció el continuo hostigamiento de las fuerzas de Seguridad del Estado en Cuba a miembros de la disidencia, entre los que mencionó a Roberto de Miranda Hernández, Martha Beatriz Roque y el Oscar Elías Biscet.
El Observatorio, que es un programa conjunto de la Organización Mundial contra la Tortura y la Federación Internacional de Derechos Humanos, reclamó en un comunicado la inmediata adopción de medidas para garantizar la seguridad, integridad física y psicológica de Miranda, Roque y Biscet, así como de otros activistas cubanos objeto de un intenso acoso desde el pasado 28 de febrero.
La difusión de esta nota ha coincidido con la decisión de crear el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, una instancia superior a la actual Comisión de Derechos Humanos, y de la cual el gobierno de La Habana aspira a formar parte.
El Observatorio ha exigido al régimen cubano que cumpla con la Declaración sobre los Defensores de Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de la ONU el 9 de diciembre de 1998, en particular en lo referente a la "protección al derecho de toda persona individual o colectiva de promover la protección y el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales".
A escala internacional, el organismo ha pedido que se interceda ante las autoridades cubanas para que cesen el hostigamiento y los malos a contra la disidencia interna. En su nota, el Observatorio reitera la honda preocupación por las agresiones físicas y verbales sufridas por Martha Beatriz Roque y la situación en que se encuentra Oscar Elías Biscet, quien cumple una condena de 25 años de cárcel.
También se refiere a las amenazas sufridas por miembros de la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales por parte de seguidores del régimen. En particular, menciona los casos de Roque y Aurora González Veliz.
El Observatorio considera que estos actos forman parte de la campaña de acoso continuado contra los defensores de derechos humanos, y denuncia las dramáticas condiciones de detención, que atentan contra la integridad física y psicológica de los presos de conciencia en la Isla.
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