“La tecnología se ha convertido en una infraestructura de libertad en Cuba”, dice Yoani Sánchez

La periodista cubana Yoani Sánchez ha sido galardona con el premio “Jaime Brunet 2010 a la Promoción de los Derechos Humanos”, otorgado por la Universidad Pública de Navarra (UPN), en un acto al que no ha podido acudir porque el régimen le ha negado la autorización para viajar fuera de la Isla.

En la entrega han participado diez periodistas navarros afincados en Madrid, quienes han contado diferentes aspectos de sus vidas profesionales, ya que este premio se enmarca en la celebración de la segunda jornada “Navarra en los medios”.

El acto ha culminado con la entrega a la periodista cubana del galardón, que reconoce su labor como bloguera en la denuncia de la situación de los derechos humanos en la Isla.

Yoani Sánchez es la mente y el corazón que impulsa el famoso blog Generación Y, también considerada como una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista TIME y galardonada con premios como el Ortega y Gasset de Periodismo.

Eugenio Trulla, que ha recogido el premio en su nombre, ha leído una carta escrita por la bloguera cubana, fechada el 5 de octubre, en la que ha agradecido al jurado el reconocimiento que le ha dispensado.

Sánchez dice en la carta que el premio, que también ha recaído en ilustres figuras del mundo del periodismo, “ahora recae en una humilde ciudadana, cuyo camino de lucha es el periodismo y la narración de su cotidianeidad”.

La periodista cubana asegura también “que no se trata tanto de un galardón por el camino recorrido, sino un estímulo para el sendero difícil que me falta y nos falta por recorrer a todos los cubanos”, agrega.

La reconocida bloguera ha asegurado en la misiva que para los “inconformes” a los que en Cuba les está denegada la posibilidad de tener un espacio en los medios nacionales, la tecnología se ha convertido para muchos y en especial para ella en una “infraestructura de libertad”.

Sánchez dice que cuando se enteró del premio, tenía la impresión de que la “crítica situación” de los derechos humanos en Cuba tenía obligatoriamente que mejorar, “con el optimismo de que no se podía caer más profundo”.

“Pensaba que el 2011 nos depararía una Cuba más inclusiva —continúa— más democrática, pero la vida, que es testaruda en extremo, ha hecho pedazos mis ideas de que el futuro tiene que ser mejor; las libertades ciudadanas, efectivamente, han empeorado”.

En Cuba, asegura la galardonada, pronunciar la frase “derechos humanos” siempre ha producido rechazo, problemas y miedo, por eso, explica, tardó 30 años de su vida en descubrir su propia voz, “acallada entre las consignas y los censores”.

“Finalmente en abril de 2007 —cuenta— abrí un blog, una travesía personal por el peligroso torrente de la expresión, que cuatro años después ha dejado de ser un espacio individual y mi voz ha pasado a trasmitir muchas de las denuncias que otros compatriotas no tienen la oportunidad de sacar a la luz”.

Al acto ha asistido el presidente del Parlamento Navarro, Alberto Catalán, y una de las vicerrectoras de la Universidad Pública de Navarra (UPN), Eloisa Ramírez, quien ha leído un discurso de reconocimiento.

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