Miles de viviendas afectadas en la región oriental por el paso de Sandy

En la Isla continúan hoy con los trabajos de recuperación y evaluación de daños materiales causados por el huracán Sandy, que dejó once muertos y estragos considerables en el este de la Isla, mientras se espera la valoración económica oficial de las pérdidas, reportó la agencia Efe.

Datos preliminares cuantifican en miles las viviendas afectadas en esa región, principalmente en las provincias de Santiago de Cuba y Holguín, las más perjudicadas por el paso del huracán con categoría dos en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de cinco, durante la madrugada del jueves.

Santiago de Cuba ha reportado hasta el momento más de 4.000 derrumbes de casas y 27.000 desperfectos totales en techos, sin incluir las cifras de la ciudad capital, donde residen 494.000 personas.

De los once fallecidos, nueve murieron en Santiago y algunos de ellos a causa de derrumbes en viviendas, si bien las autoridades aún investigan otros casos.

Los informes divulgados por medios oficiales insisten este viernes en resaltar el panorama desolador de Santiago, donde “no quedó una barriada ni cuadra que no sufriera considerables daños” en casas, comercios, instituciones estatales y centros industriales.

Aunque los mayores perjuicios a infraestructuras ocurrieron en el área residencial, se suman importantes estragos en la agricultura, las comunicaciones, carreteras y el sector energético.

De acuerdo con el Ministerio de Informática y Comunicaciones, existen serios problemas en la telefonía y la radiodifusión, con daños en la fibra óptica de la región y la caída de cuatro torres de onda media en Santiago y Holguín.

Se calculan en miles los árboles derribados y aún se cuantifica el número de postes eléctricos y cables telefónicos caídos, lo que ha provocado unas 17.300 interrupciones telefónicas.

En cuanto a la agricultura, Santiago tiene daños en al menos 2.600 hectáreas de plátano, y las plantaciones de café en las montañas están “muy deterioradas”.

También hay perjuicios en 27 toneladas de alimentos en almacenes, y las autoridades han comenzado a trasladar cargamentos de productos agrícolas, materiales de construcción y de aseo que se encontraban en depósitos que perdieron sus cubiertas.

Holguín estima en más de 17.300 las viviendas de su territorio que tienen algún tipo de desperfecto total o parcial.

Los medios cubanos calificaron de “crítica” la situación en la agricultura de esa región, con daños en 21.000 hectáreas de caña y en unas 6.000 de otros cultivos.

Como parte de los primeros trabajos de recuperación, el gobierno ha organizado varias brigadas de trabajadores del sector eléctrico de todo el país para restablecer el servicio en las regiones afectadas, así como grupos para limpiar las vías de escombros y árboles.

En medio de esas labores, este jueves el Instituto de Meteorología de Cuba pidió que se mantenga la atención a las intensas lluvias y vientos asociados al huracán Sandy que están afectando a varias provincias del occidente y centro.

El Centro de Pronósticos de ese instituto informó de que la situación se mantendrá hasta que Sandy se aleje aún más de la Isla.

En Villa Clara quedó interrumpido el paso de la autopista nacional debido a las inundaciones provocadas por las intensas lluvias y se ha cortado la circulación vial hasta que estas disminuyan.

Procedente de Jamaica, el ojo del huracán Sandy tocó tierra en el sureste de la Isla, muy cerca de la ciudad de Santiago, y cruzó el país hasta la costa noreste en cinco horas con vientos huracanados sostenidos de entre 175 y 165 kilómetros y lluvias intensas.

Aunque todavía no existen datos oficiales sobre las pérdidas económicas, los muertos y daños materiales causados por Sandy lo convierten en uno de los huracanes más devastadores que han azotado Cuba los últimos años.

En la última década, el huracán Dennis de 2005 fue el que causó el mayor número de muertes en Cuba, con 16 fallecidos, seguido por el Ike de 2008 que dejó 7 víctimas mortales.

Por su parte, las pérdidas sumadas del Ike, el Gustav y el Paloma en ese mismo año devastaron la Isla con cifras que ascendieron a los 10.000 millones de dólares.

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