La Habana intenta rectificar el disparate de los 'profesores generales integrales'

Cuba cambia polémico modelo de 'profesores generales integrales'

"La ministra de Educación de Cuba, Ana Elsa Velázquez, anunció que en el próximo curso habrá un 'nuevo modelo' docente en el que los polémicos 'profesores generales integrales', jóvenes que imparten todas las asignaturas, tendrán más tiempo para prepararse bajo supervisión. El anuncio se hizo después de que las autoridades cubanas admitieran que la educación, una de las banderas de la revolución, arrastra problemas de capacitación, éxodo de profesionales y bajas remuneraciones".

"…Con el anuncio de la ministra, los maestros de secundaria básica —muchos de ellos adolescentes que no han acabado sus propios estudios— tendrán desde septiembre dos sesiones semanales de preparación y, en 'cada trimestre, impartirán las asignaturas de un área del conocimiento', explicó Velázquez (…) En cada escuela habrá dos docentes veteranos dedicados a preparar a esos profesores, que aparecieron en el 2000 por la escasez de docentes registrada durante la crisis que padeció Cuba tras el desplome del bloque socialista pero, que se publicitó como una nueva 'revolución educacional' liderada por el entonces presidente Fidel Castro".

"Los 'profesores generales integrales' imparten a grupos de 15 alumnos todas las asignaturas, excepto Inglés y Educación Física, ayudados por clases televisadas pero, se han producido numerosas quejas por los resultados obtenidos (…) Los cambios anunciados también llegarán a las escuelas primarias, con un aumento de asistentes educativas, para dar 'un mayor margen al maestro para prepararse, pues hasta el curso precedente también hacían función de asistentes'…".

MSN Latino, Estados Unidos
21 de agosto de 2008

La influencia real de Fidel Castro sigue siendo un misterio en Cuba

"Uno de los últimos chistes que circulan por La Habana cuenta cómo Raúl Castro visita a su convaleciente hermano Fidel y le pide el mando a distancia para cambiar el programa de televisión, que no le gusta. 'El mando no se lo doy a nadie', replica aferrado al aparato el ex presidente cubano. El humor, sempiterna válvula de escape, refleja con agudeza una pregunta que pocos se atreven a hacer en voz alta en la isla: ¿Hasta dónde llega el poder real de Fidel Castro en la nueva era de Cuba?".

"A seis meses del comienzo oficial del gobierno de Raúl Castro en sustitución de su histórico hermano Fidel, cubanos de a pie y analistas siguen sin ponerse de acuerdo sobre la influencia real de quien durante casi medio siglo dirigiera en primera línea los designios de la isla.

"…En su discurso de asunción de la presidencia, el 24 de febrero, [Raúl] anunció que le 'consultaría' [a Fidel] las decisiones más importantes del país. En aquel momento, algunos analistas lo consideraron una muestra de que nada iba a cambiar en la estructura de poder real en Cuba. Otros, sin embargo, lo registraron como una inteligente 'estrategia' de Raúl para avanzar en la senda de los cambios prometidos con la connivencia tácita del tradicional líder de la isla. Seis meses después, parecen ser más los que apuntan a la primera teoría que a la segunda".

"'Raúl Castro es un administrador, las decisiones las sigue tomando Fidel y aun cuando Fidel esté postrado en una cama, Raúl va a seguir estrictamente los dictados de Fidel', sostuvo el disidente Francisco Chaviano en conversación con la agencia DPA. Desde Washington, también cunde la percepción de que Fidel Castro 'sigue siendo una fuerza importante en el gobierno cubano'. 'Ha logrado combinar la organización de una sucesión política con su hermano Raúl y seguir vivo para hacer de carabina (acompañante) del nuevo gobierno', dijo a DPA Dan Erikson, especialista en Cuba del Diálogo Interamericano, un think tank de Washington".

"Para el también opositor Manuel Cuesta Morúa, que de un optimismo inicial dice haber pasado a un mayor pesimismo respecto al nuevo gobierno cubano, opina que Fidel Castro 'frena las posibilidades del país'. El portavoz de Arco Progresista no es el único en afirmar, dentro y fuera de la isla, que Fidel Castro está siendo el cortapisa de los cambios que arrancaron con cierta fuerza en los primeros meses de gobierno de su hermano (…) Cuesta Morúa continúa convencido de que el histórico líder cubano 'es un factor negativo para el despegue de los cambios, le ha quitado la ilusión y el pulso a Raúl Castro, que le debe mucho a su hermano'…".

Milenio, México
22 de agosto de 2008

Cubanómetro

"Encuentro una enciclopedia para niños y, en aras de comprobar su calidad, voy directo a donde dice 'Cuba'. Una pequeña frase resume que vivimos en 'una isla en el Caribe donde los nativos siembran arroz en las laderas de las montañas'. En un primer momento pienso que me he equivocado de país, pero no, así nos describe la estereotipada publicación digital. Después de la risa que me provoca tan equivocado retrato, caigo en la cuenta de todos los clichés con los que cargamos los cubanos".

"Por nuestras calles, por ejemplo, caminan también mujeres que no se parecen en nada a las mulatas de los afiches. Aquí tenemos todo el espectro de colores que pueda imaginarse. Desde lánguidos rubios de ojos azules hasta los tonos más cercanos a la noche. Es posible interactuar con una gama amplísima de creencias religiosas y de posturas políticas, chocar con una impresionante pluralidad en los más variados temas".

"Escucho a éste que es liberal, al otro demócrata cristiano y hasta una nueva oleada de anarquistas. No veo, sin embargo, ese arco iris de opiniones representado en el retrato de nuestra escena política. Más bien a un grupo encaprichado en teñirlo todo de un solo color. Una isla marcada por la pluralidad, atada a un discurso monocromo".

"Estoy harta de que nos quieran hacer creer que todos los cubanos jugamos dominó, somos santeros o gritamos consignas en la plaza; que somos expertos bailadores y antiimperialistas acérrimos. Cansada de que unos pocos determinen quién puede o no llevar el gentilicio de esta tierra. Esos mismos que se atribuyen el derecho a llamar "anticubanos" a los que piensan diferente del sacrosanto criterio del partido. Con una vara eminentemente ideológica, se pretende determinar nuestra identidad. Cuba, la Cuba profunda y perdurable, se ríe de todas esas caricaturas".

Yoani Sánchez, El País, España
22 de agosto de 2008

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