Alumnos de Santiago de Cuba reanudaron el curso escolar

Los alumnos volvieron a clases este lunes en Santiago de Cuba, dos semanas después de que el huracán Sandy golpeara la ciudad, y donde los servicios de electricidad, agua, gas y teléfono todavía no se restablecen a plenitud, informa AP.

Cerca de 900 escuelas resultaron dañadas en ese territorio y no todas fueron rehabilitadas, por lo que muchos alumnos reanudaron el curso escolar en “viviendas que solidariamente se han brindado, en salas de vídeo, bibliotecas, salas de cultura, cines y otros locales”, cita AP la información publicada por el diario oficial Granma.

Según lo expresado al diario por la subdirectora provincial de Educación, Dania López, al menos 129 centros se han visto obligados a utilizar alguno de esos locales alternativos para sus alumnos.

Como ejemplo, la funcionaria refería este lunes que estudiantes de primero, sexto, noveno y doce grados de 31 de esos centros, recibirían las clases en “otras escuelas”, alternando la docencia en horas de la mañana y de la tarde, una situación que obliga a que “todos deberán resolver en sus casas las tareas equivalentes al desarrollo habitual de la doble sesión”.

López también informó que otra medida tomada para paliar el estado de los centros ha sido el adelanto de las prácticas docentes planificadas para el segundo semestre, en el caso de aquellos alumnos que asisten a escuelas pedagógicas.

En total, el huracán Sandy afectó 895 centros —con una matrícula de 180.622 alumnos—, de los cuales el 61 % funcionaron ya el pasado viernes con la asistencia de 83.506 educandos, según lo publicado por el diario oficialista.

Los mayores daños correspondieron a 29 pequeñas escuelas para 608 niños en zonas del Plan Turquino, que fueron totalmente destruidas.

Aún por restablecerse al 100 % los servicios de electricidad, agua, gas y teléfono

Berta Serguera lleva 12 días sin luz en un barrio de Santiago de Cuba, aunque en casa de su hermana Mirta, el servicio se restableció el jueves.

“Las cosas han ido mejorando pero no tenemos luz. Cerca (de casa) veo calles que ya tienen luz, priorizaron los edificios más altos pero ya la estoy esperando ansiosamente”, expresó Serguera, de 82 años, en conversación telefónica con AP.

Ambas hermanas tienen agua, gas y teléfono, pero Mirta Serguera, de 79 años, comentó que el abastecimiento de comida “esta muy difícil”.

Yolanda Tabío, de 67 años, tampoco tiene luz, en un barrio céntrico de Santiago, pero vecinos cercanos ya reciben el servicio. Hace tres días que tiene gas, pero su teléfono funciona a intervalos, declaró. “Lo más importante es poder hervir el agua, porque entra muy turbia, y hay que tomar medidas para evitar enfermedades”.

Según datos publicados por el diario Sierra Maestra, de Santiago de Cuba, el sistema eléctrico se restableció a un 28 %.

“Ya reciben el servicio los hospitales, las estaciones de bombeo de agua y de bomberos, las panaderías y los edificios altos, mientras que de los 127 circuitos de la provincia, 23 están conectados parcialmente y 34 de forma total”, cita AP al rotativo.

El reporte recuerda las palabras del presidente Raúl Castro cuando recorrió las provincias afectadas por el meteoro: “Ya sabemos todos los problemas que tienen, no pierdan la confianza en su revolución. Yo me quedo aquí hasta que vuelva la luz”, les dijo Castro, vestido con el uniforme de general de ejército, a residentes de Santiago.

Holguín recupera poco a poco la normalidad

En la provincia de Holguín, donde el huracán también golpeó fuerte, más del 83 % de residentes ya recibe el servicio eléctrico y los escolares retornaron a sus actividades, aunque también en algunas instalaciones improvisadas.

En el pueblo holguinero de Urbano Noris, destaca el reporte de AP, Alien Vallejo acomodó “sillas y mesas que sustituyen los muebles habituales de la sala de su casa, convertida en aula” para que su hija Adriana y sus amiguitos del primero y segundo grados reciban instrucción. Según Granma, el huracán Sandy castigó 33 de las 55 escuelas del pequeño poblado.

Los alumnos de tercero y cuarto grados también acudieron a la casa de otra vecina, Idoris Martínez, cuya habitación sirve de aula, señaló el rotativo.

“Ni ese huracán ni ninguna adversidad va a derrotarnos. El curso escolar debe continuar”, aseguró al diario Yudelkis Calzada, jefe de educación primaria del municipio.

Sandy golpeó el oriente de la Isla el pasado 25 de octubre, con vientos de hasta 165 kilómetros por hora, provocando la muerte de 11 personas y provocando numerosos daños materiales.

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