Diputado italiano destaca importancia de la presión internacional para el cambio en Cuba
Marco Cappato expresó satisfacción por haber podido acompañar el pasado domingo a las Damas de Blanco en una marcha por céntricas calles de La Habana.
Los instrumentos de "acción no violenta" en Cuba y la presión de los "demócratas" de todo el mundo pueden conducir al régimen actual cubano a una "situación" de cambio, señaló este martes en Miami el eurodiputado italiano Marco Cappato, que el pasado domingo marchó junto a las Damas de Blanco por céntricas calles de La Habana.
"La tarea de los activistas demócratas puede posibilitar una alternativa de amplias libertades individuales y derechos humanos en Cuba", dijo Cappato, del Partido Radical italiano, informó EFE
Cappato y otros cuatro miembros de su partido se sumaron sorpresivamente el domingo a la marcha que realizaron en La Habana las Damas de Blanco, en coincidencia con el cuarto aniversario del inicio de la oleada represiva que en 2003 llevó a la cárcel a 75 disidentes.
Junto a Cappato, estaban el diputado italiano Maurizio Turco y María Fida Moro, ex diputada e hija del primer ministro italiano Aldo Moro, asesinado en 1978.
En opinión del eurodiputado, la marcha de las Damas de Blanco es un "esfuerzo totalmente pacífico para pedir la libertad de los presos políticos y de opinión".
La "misión" de los miembros del Partido Radical Transnacional y No Violento es "promover la democracia" y "eliminar de forma pacífica" los obstáculos hacia las "libertades individuales".
En ese sentido, manifestó su satisfacción por haber podido "apoyar", como organización que trabaja con la ONU, las "acciones" llevadas a cabo por las Damas de Blanco y expresó su "sorpresa" por no haber sufrido ningún tipo de hostigamiento por parte de las autoridades cubanas.
"Pensábamos que nos iban a esposar inmediatamente", prosiguió, pero el "régimen cubano" debió considerar que "era mejor no perseguirnos ni arrestarnos". "Lo importante es tomar la ocasión como algo positivo", puntualizó.
Preguntado sobre cuál fue la reacción de las Damas de Blanco cuando constataron que ellos se sumaban a la marcha, Cappato señaló que se "sorprendieron al principio", sobre todo, precisó, en el momento en el que desplegaron su pancarta.
Agregó que inmediatamente comprendieron que se trataba de una acción de apoyo y no de acoso. "Les dijimos que éramos diputados y un soporte internacional a su causa", relató.
Nuestra tarea es "urgir a un cambio no violento en Cuba hacia la democracia", dijo.
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