Informe pide a Washington y La Habana flexibilizar política migratoria
El Gobierno cubano debe, primero que todo, realizar un cambio a su legislación y Constitución que “garantice a los cubanos la plena libertad de circulación y su derecho a fijar residencia libremente”
Los Gobiernos de Washington y La Habana deben flexibilizar sus respectivas políticas migratorias para que la diáspora cubana tenga, a mediano plazo, una “plena participación” en la economía en Cuba, según un informe divulgado hoy en Washington por la Universidad Internacional de Florida (FIU).
El informe “La diáspora cubana en el siglo XXI”, de 87 páginas, ofrece recomendaciones a los Gobiernos de EEUU y de Cuba para mejorar las relaciones de la diáspora cubana con la Isla.
Realizado por una comisión de académicos cubanos de las universidades FIU, Harvard, Pittsburgh y de Puerto Rico, deja en claro su oposición al embargo de EEUU y considera que las sanciones y restricciones en vigor no deben extenderse al nuevo sector no estatal privado en Cuba.
En ese sentido, recomienda que Washington elimine los “obstáculos” de la diáspora cubana para desarrollar vínculos con la Isla, si bien hay cubanoamericanos que ya colaboran con familiares y amigos que buscan “explorar las posibilidades laborales y de ingresos” en el nuevo sector privado emergente.
Al señalar que se trata de un sector no estatal de la economía cubana, el informe de la FIU recomendó que EEUU excluya del embargo “aquellas transacciones económicas que fuesen realizadas” en ese sector emergente.
El documento no pretende evaluar las medidas económicas que La Habana ha venido adoptando desde agosto de 2006, pero sí subraya que el proceso de “actualización económica” tendría más posibilidades de éxito “si fuese acompañado de una profunda y paralela revisión de la política migratoria vigente, que la alinee de lleno con estándares universales”.
Así, por ejemplo, recomienda que el Gobierno de Cuba permita que los cubanos en el exterior jueguen un papel en el incipiente sector privado en la Isla.
En el marco de una eventual “actualización y normalización de las políticas migratorias” en ese país, el informe recomienda la “eliminación del sistema de permisos de entrada y salida de sus nacionales, el derecho a fijar libremente la residencia temporal o permanente en otro país y otras disposiciones dirigidas a facilitar flujos migratorios circulares”.
Entre esas disposiciones se incluiría una reducción de los costos actuales, la eliminación de las trabas de trámites consulares, pasajes, llamadas telefónicas, correos electrónicos, homologación de títulos y la supresión de “otros obstáculos” para una normalización de las relaciones entre la diáspora cubana y la Isla.
El Gobierno cubano debe, primero que todo, realizar un cambio a su legislación y Constitución que “garantice a los cubanos la plena libertad de circulación y su derecho a fijar residencia libremente”, dijo.
También debe modificar el sistema legal vigente de manera que tanto emigrados como radicados en Cuba sean “iguales ante la ley y en el campo de la economía”, y ambos tengan iguales o mejores posibilidades de participación en iniciativas económicas que las extendidas al capital extranjero.
Otro posible cambio es que la diáspora pueda participar con los cubanos en la Isla en proyectos de inversión social y obras comunitarias parecidos al “Tres por Uno” que ha puesto en marcha México en el estado de Zacatecas con sus connacionales en el exterior.
Ese proyecto —que el informe consideró como “especialmente pertinente para Cuba”— cuenta con el aporte privado de emigrados, recursos locales y nacionales, y el apoyo de agencias multilaterales y fundaciones privadas.
El informe pide que EEUU y Cuba eviten que “su conflicto bilateral” inhiba las relaciones entre los cubanos dentro y fuera de la Isla, y que Cuba y su diáspora reconozcan “la oportunidad de construir un futuro compartido y mejor”.
También destaca las medidas que puede tomar EEUU porque es donde vive la mayor parte de la diáspora cubana, pero también hace un llamado a aquellos otros países que reciben emigrados cubanos “a que les respeten sus derechos y dispensen el trato digno” dictaminado por pactos multilaterales.
El documento, que se presentará durante un foro del Diálogo Interamericano, fue divulgado en unos momentos en que, pese a la objeción de líderes del exilio cubano en EEUU, la Administración de Barack Obama ha flexibilizado los viajes y remesas de los cubanoamericanos y los viajes académicos, culturales y religiosos a la Isla.
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