Actualizado: 23/04/2024 20:43
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Hermanos al Rescate

Raúl Castro ordenó el derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate

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Raúl Castro planificó y ordenó el derribo, en 1996, de dos avionetas de la organización de exiliados Hermanos al Rescate, hecho en el que murieron cuatro pilotos, reveló este domingo el diario El Nuevo Herald.

En su sitio en Internet, el periódico hizo pública la grabación de una conversación en la sede provincial del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Holguín, durante un encuentro que se celebró el 21 de junio de 1996 con la participación de funcionarios gubernamentales y periodistas de la emisora oficialista Radio Rebelde. El derribo de las avionetas se había producido el 24 de febrero de ese mismo año.

"Yo decía que traten de tumbarlos arriba del territorio, pero ellos entraban en La Habana y se iban… Claro, con un cohetazo de esos, avión-avión, lo que viene para abajo es una bola de fuego y que va a caer arriba de la ciudad", dice Raúl Castro en la cinta.

"Bueno, túmbenlos en el mar cuando se aparezcan; si no, consulten los que tienen las facultades", agrega el general de Ejército.

De acuerdo con el diario, la grabación, de más de 11 minutos, fue hecha por personal técnico de Radio Rebelde. Durante la conversación, Raúl Castro advierte en dos ocasiones a los periodistas que "no publiquen nada de esto".

El Nuevo Herald dice haber recibido una copia desde Cuba a través de la agencia Nueva Prensa Cubana, con sede en Miami.

Pocos días después de la conversación, el 27 de junio de 1996, la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI), de Naciones Unidas, confirmó que las avionetas de Hermanos al Rescate fueron abatidas en aguas internacionales por cazas MiG del Ejército cubano.

No quería dar opiniones "hasta que la OACI no se manifestara", pero "como lo tienen redactado hasta el momento (los miembros de la OACI), no es beneficioso para nosotros", afirma Raúl Castro en la cinta.

La Habana sostiene que las avionetas fueron abatidas en aguas territoriales de la Isla.

Hasta el momento se atribuía a Fidel Castro la autorización para actuar contra las avionetas. La grabación, según el periódico, revelaría que Raúl Castro tuvo en sus manos la planificación y la orden directa del derribo.

La decisión se habría tomado durante una reunión de altos mandos militares el 13 de enero de 1996, fecha en que aviones de Hermanos al Rescate lanzaron proclamas sobre La Habana.

"Yo aclaré que (la decisión) había que descentralizarla si queremos que jugara su papel, y a cinco generales se les dio las facultades", afirma Raúl Castro en la cinta. "Ellos (Hermanos al Rescate) iban a ir incrementando esto y no se tuvo más remedio que tomar esta decisión", añade.

Raúl Castro revela además que las fuerzas militares cubanas estaban listas para actuar desde una incursión de las avionetas el 13 de julio de 1995.

"Yo me fui (en 1995) al puesto de mando del MININT y trasladamos el mando de la Aviación para allí, o sea para el edificio del Ministerio del Interior en la Plaza de la Revolución", dice.

"Teníamos cámaras en el Morro, en diferentes azoteas, se captó y se filmaron. Un MiG-23 se les puso detrás… 'Lo tengo, lo tengo', dijo. 'Déjalo que se vaya', se le ordenó".

Más adelante afirma que la orden de actuar permanece en vigor. "La orden está dada, pero ahora tenemos que actuar con más flexibilidad", dice. "Y se mantiene".

La grabación revela también datos sobre la alerta extrema que se generó en los días posteriores al 24 de febrero, incluyendo precauciones especiales para proteger los viajes de Fidel Castro dentro del país.

En otro momento de la conversación, cuenta que el gobierno cubano advirtió a Washington que derribaría cualquier avioneta o avión de inteligencia militar que se acercara a La Habana durante las celebraciones del 1 de mayo de 1996 en la Plaza de la Revolución.

"Se lo mandamos a decir el primero de mayo", recuerda Raúl Castro. "Yo con Fidel nunca estoy junto, como ustedes saben, pero el primero de mayo yo estaba allí en la tribuna y la orden era que el que se apareciera por allí, sea el que sea, sí había que llevárselo al pico".