«Es hora de la desfachatez y el descaro»

Claudio Fuentes nació el 29 de enero de 1975, en Ciudad de La Habana. Graduado en Pedagogía, en la especialidad de Biología, y de la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro, reside en la capital y actualmente se dedica a la fotografía.

¿Existe "la Revolución"?

Por desgracia, existe la revolución como proyecto represivo, totalitario, culturalmente cojo y mediocre, como sistema económico cómico-absurdo, politizado y cerrado al mundo, como si todavía existiese el viejo concepto de la Guerra Fría. Como órgano putrefacto de momificación corrupta abarrotado de sus cleptócratas que todo, absolutamente todo, lo infectan. Existe como fenómeno estático donde el tiempo no es considerado dinero, sino como el cesto de basura donde, con imprecisa lentitud, caen los licuados mojones de Fidel a través de su infeliz ano nuevo.

Existe el más descarado nepotismo, que coge el culo a todos y cada uno de sus conciudadanos, incluyendo, claro está, a los de su más cercana camarilla de perros Randy, aunque para estos últimos, las migajas monetarias sean más suculentas. Te lo cogen cuando te callas y no denuncias, cuando aceptas sus reglas, cuando les gritas y te meten preso, cuando vas a votar obligado y cuando no votas. Te singan con los altísimos precios que pagas en CUC por productos de mierda con calidad de manto freático.

Esto no sólo te lo hacen a ti, sino a tu familia, si desde el extranjero te mandan dinero para que sobrevivas y no te metas en cosas consideradas ilegales. En este mismo punto debes saber que a tu familia la joden el doble, ya que cuando recibes los dólares el gobierno te quita a ti y a los tuyos el 20%, por lo que podemos concluir que esta revolución no sólo esclaviza a sus trabajadores, sino además esclaviza a los trabajadores de diversos países que envían dinero a sus familiares cubanos. Viva el comunismo esclavista!!!!

Continuamos… te joden con sus ridículos salarios, con sus mentiras sin elocuencia, con su bloqueo a la información, y hasta con la mirada mientras discursan. Por lo tanto, existe la revolución sodomita, que carga sobre sus espaldas miles de asesinatos y crímenes impunes, la revolución creada por sus primeros traidores. Somos la revolución que camina pa'trás, desnuda, enjabonada con jabón Batey…

A día de hoy, ¿hay futuro para las nuevas generaciones dentro de Cuba?

Claro que hay futuro, un negro y estúpido futuro, un futuro averiado como la cara de Randy. En caso de prolongarse mucho más este engendro, soportaremos hasta la caída final, que de tan desmadejada, no hará ni ruido ni fiesta, ya que estaremos muy exhaustos.

Cuando eso ocurra, comenzaremos lo más probable a globalizarnos y quizás mejoren algunas cosas, aunque pagaremos con sangre la letra mientras entra. Es el precio normal de conectarse a un mundo para el cual no estamos preparados y es muy lógico que los fracasos iniciales sean garrafales. Habrá que tener paciencia, aprender a golpetazos sobre la marcha y asumir los múltiples cambios con flexibilidad, apertura mental y cierto estoicismo. De lo que sí estoy seguro es que no existe más que el fracaso y un triste remordimiento interno para las generaciones mayores, que fueron engañadas por tantos años. A esas, a las que les fueron prometidos futuros —su hoy por hoy— de opíparas condiciones para su vejez, y sólo recogen desechos de hospital.

¿Es visible una lucha entre generaciones?

Siempre que coexistan al menos dos generaciones, tendrán lugar luchas de diversa índole. Para las nuevas generaciones y para las no tan nuevas, es más que claro que aunque nuestra irrealidad pretenda mantenerse tan hostil como en sus inicios, hoy cada vez somos más los que de forma grupal e individual proyectamos nuestras ideas sin metáforas oscuras, de manera más abierta, siempre fuera de la oficialidad, aunque esta puede acceder a nuestra irreverencia y así lo pretendemos. Cada vez somos más los que nos desenmascaramos y brindamos nuestros nombres reales, cargando, como es lógico en una dictadura, con las consecuencias de nuestra irreverencia-derecho.

Cada vez más conectados entre los que se atreven, inoculando el irrefrenable veneno entre los que están igual de convencidos, pero que aún temen por las consecuencias de romper su silencio y cagarse en la madre de unos cuantos, cada vez buscando, creyendo y diseminando el amor por la pólvora de la libertad de expresión y su inmunidad. Cada vez asumiendo toda la información que brinda el mundo a través del poco internet que podemos canibalear con nuestras uñas, cada vez denunciando y posteando para el ciberespacio nuestros debates, chistes, nuestra dudas y odios, nuestras propuestas e ilusiones, nuestras burlas descarnadas y muchas veces triste de fondo para este alucinante absurdo con mugre.

Como diría Fito Páez: "Nadie nos prometió un jardín de rosas". La palabra gratis es una de las abstracciones más inertes de los diccionarios, por lo que si quieres un conejo, cázalo.

¿Qué habría que hacer, en la educación y en los medios de comunicación del futuro, para que no se repita un período así en la historia de Cuba?

Creo que ante todo se necesita un gobierno demócrata, no corrupto, que permita y se pliegue a las exigencias de una economía de libre mercado, eliminando la burocracia para futuras transacciones e inversiones extranjeras en Cuba, asumir la pequeña empresa y democratizar la información, las finanzas y la tecnología. La pluralidad de programas educacionales, tanto en el sector público como privado. La creación de una prensa independiente y libre para el escrutinio gubernamental, la economía y las finanzas, el sector social y el legal-judicial.

Se necesita un radicalísimo cambio con previo estudio de nuestra constitución actual, donde una de las primeras leyes sea la declaración de las riquezas de los presidentes, ministros y otros altos funcionarios del gobierno en curso, tanto antes como después de sus mandatos.

Posiblemente la fotografía haya sido una de las mayores formas de expresión del mesianismo castrista, desde las palomas en el hombro de Fidel hasta la imagen "histórica" del Che tomada por Korda. ¿Qué opinas?

Creo que muchos fotógrafos de hoy continúan denunciando con sus lentes las incongruencias del sistema castrado, pero el discurso y la manera ya me dejan siempre aburrido, un poco más de lo mismo, demasiado correcto y pretenciosamente fotográfico, con referentes de fotógrafos cubanos ya establecidos como imagen, sin querer romper lo viejo en el seguimiento de cánones agotados.

Me parece que es hora de provocaciones, de acusaciones directas, de un arte contrarrevolucionario como única vía para una nueva revolución en el arte y en la sociedad, una fotografía sediciosa. Hora de la desfachatez y el descaro, de la risotá craquelada y la burla imperiosa, la hora de los que están hartos de sus pasivas convicciones, siempre las mismas, y pretenden hacer algo concreto y sin grises intermedios, buscando la diversión aun con sacrificio, de los que consideran que más reflexiones no tiene sentido. Para reflexionar está Fidel mientras hace caca desde su inmovilismo.

¿Cómo se traduce lo de "apretarse más los cinturones" que ha pedido Raúl Castro?

Se traduce en que recibiremos más vigilancia y represión, quizás más encarcelamientos, inevitablemente mucha más desinformación, más pene semierecto, enfermo, verde olivo y fofo, aunque cada vez, por suerte, con menos Viagra. Más mediocracia devenida gerontocracia, más triunfo de la estupidez iracunda, más palabras macilentas y con todo esto y más, demasiados cubanos talentosos que abandonarán irremediablemente este país pocilga buscando un futuro más potable.

Si te dieran una foto de Fidel, ¿qué harías con ella?

Quizás la analice compositivamente. Por supuesto, le haría a los amigos algún chiste donde el Fifo dice, a través de mi boca, alguna estupidez, otra de las tantas. Tendría que ser una foto donde apareciera con cara de estúpido, desesperado o feo, para atesorarla como trofeo. Todos sabemos lo extremadamente fotogénico que es ese cabrón, lo imponente de sus gestos, etcétera.

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