Cáritas Cuba recibió facilidades oficiales para socorrer a damnificados de los huracanes Ike y Gustav, pero se precisa "una colaboración genuina" debido a la magnitud de la tragedia, dijo la directora de esa organización católica humanitaria, Maritza Sánchez, reportó la AFP.

"Debemos lograr una cooperación genuina con las estructuras del Estado", pues la situación de desastre persistirá por largo tiempo, afirmó Sánchez en una entrevista incluida en el último número de la publicación católica mensual Palabra Nueva, que comenzó a circular este jueves.

"Se necesita definitivamente cambiar, porque hasta ahora ha habido un acercamiento, pero no hemos logrado todavía un trabajo de conjunto, institucionalizado, con toda la confianza que exige y que pueda marcar una nueva etapa de colaboración en beneficio de todo el pueblo", dijo Sánchez.

Gustav e Ike devastaron la Isla a principios de septiembre, dejando pérdidas por entre 5.000 y 10.000 millones de dólares y medio millón de viviendas dañadas.

Las autoridades aceptaron ayuda internacional de una treintena de países, pero rechazaron la ofrecida por Estados Unidos y no han respondido a ofertas de miembros de la Unión Europea.

Sánchez señaló que las Cáritas de Alemania, España y Suiza, así como Catholic Relief Service (CRS), de Estados Unidos, han manifestado su interés en ayudar.

Tras una reunión con funcionarios gubernamentales, "se nos autorizó a hacer compras e importaciones" y se acordó "que toda la ayuda proveniente de la Iglesia norteamericana y de personas de buena voluntad fuera coordinada a través del CRS, por ser una institución que cuenta con la aprobación de ambos gobiernos", añadió.

Señaló que Caritas ha podido distribuir alimentos, materiales de higiene y artículos del hogar. "Nosotros aspiramos, desde nuestra identidad y nuestro enfoque, a poner un granito de arena, no sólo material, sino desde el punto de vista humano", concluyó.

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