Los números y el billete

Las nuevas medidas en contra del desgobierno cubano tomadas por la administración Trump ya han iniciado los habituales llantos de las plañideras a ambos lados del estrecho de la Florida. No solo el aspecto de la entrada en vigor del Título III y el Título IV, que ha generado lógicamente un rechazo de los países europeos, Canadá y otros, sino el del controvertido asunto de las remesas a Cuba, ya que la medida adoptada establece un límite de $1.000 por trimestre, lo que suma la nada despreciable —por lo menos para mí— cifra de $4.000 anuales.

Este límite pretende disminuir las remesas, que según diferentes fuentes[1] llega a miles de millones de dólares, a una cifra más modesta. Esas astronómicas cifras —que se vienen dando desde hace años— no se limitan a los envíos de dinero a familiares y amigos, también incluyen, de acuerdo a los análisis de The Havana Consulting Group & Tech,[2] las ropas, zapatos, comida, útiles para el hogar, celulares y su recarga, gastos en restaurantes, vacaciones en las playas, etc., hasta compra de casas y autos.

Claro está, como las medidas tomadas por esta administración solamente están referida a los envíos de efectivo, todos los demás acápites que conforman el gran total considerado como remesas queda incólume. Es decir, que los cubanos del lado de acá seguirán siendo gustosamente desangrados en miles de millones de dólares y por tanto la decrépita economía de Cuba continuará recibiendo esa milagrosa transfusión[3].

Mis dudas siempre han estado relacionadas en cuanto a cómo este disfrutable desangramiento afecta a los cubanos residentes en el exterior, en particular en EEUU. Veamos cómo se reflejan mis dudas en números concretos, generalmente suministrados por las mismas fuentes que nos hablan de los miles de millones enviados en forma de remesas. Los siguientes datos del año 2013 están tomados de una investigación del prestigioso Pew Research Center[4], para 2017 se utilizaron varias fuentes y una extrapolación realizada por mí.

Hemos considerado solamente a los cubanos nacidos en Cuba y residentes en EEUU, ya que he considerado poco probable que aquellos cubanoamericanos nacidos en EEUU tengan relaciones afectivas lo suficientemente profundas como para destinar una buena parte de sus ingresos al envío de remesas. Y solo hemos considerados las familias en su conjunto, ya que es también poco probable que cada miembro por separado envíe remesas. Ahora bien, ¿cuánto representa esa carga para los cubanos de origen?

Nota: Para los ingresos se utilizaron los datos de la tabla anterior
y para las remesas ver información de las citas 1 y 2.

Debo confesar que entre mis amistades y conocidos solo hay gente tacaña, egoísta y sin ningún vínculo afectivo con sus familiares y amigos en Cuba, ya que ninguno de ellos —que yo sepa—, ni por asomo efectúa esas remesas que inclusive resultan mayores que el diezmo eclesiástico o, lo que generalmente [excepto Trump] se le tributa al Tío Sam por concepto de impuesto sobre los ingresos. Tampoco mis conocidos —acepto que estadísticamente no representen una muestra confiable— llegan a los $4 mil anuales ahora autorizados. Mis cálculos deben andar algo mal o mis fuentes no son nada seguras.

Pero hay algo más, resulta que $2.384 millones de los dólares que entran a Cuba son sacados del país por los cuentapropistas de acuerdo a la siguiente tabla, considerando que ese dinero no solo proviene de las remesas sino también de las ganancias de los alquileres de automóviles y habitaciones, restaurantes, etc. Todavía le queda bastante a la gente de a pie, incluyo a todos y cada uno de los 11 millones de habitantes, para comprarse sus chucherías y su pollo de vez en cuando.

Estimación del uso de los recursos financieros generados por los empresarios cubanos, 2017

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Fuente: http://www.thehavanaconsultinggroup.com/en-/Articles/Article/67

Francamente, con todo el respeto por las fuentes consultadas, a mí no me cuadra el número con el billete.

[1] www.thehavanaconsultinggroup.com/enUS/Articles/Article/30
https://www.cibercuba.com/noticias/2019-04-16-u199572-e20037-s27061-cuba-recibio-29-mil-millones-remesas-ultima-decada-segun

[2]http://www.thehavanaconsultinggroup.com/enUS/Articles/Article/63

[3] Debemos considerar que todas las remesas que entren al territorio cubano, con la excepción de los bienes de consumos enviados y una parte de los gastos efectuados en los hoteles parcialmente en manos extranjeras, a la larga o a la corta caerán en las arcas del gobierno, salvo, y ya de esto hablaremos, aquellos dineros que salgan del país para ser invertidos o gastados fuera de Cuba.

[4]https://www.pewhispanic.org/2015/09/15/hispanics-of-cuban-origin-in-the-united-states-2013/

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