Líderes europeos piden que el diálogo político con La Habana se vincule a la mejora de los derechos humanos
Los líderes del Partido Popular Europeo (PPE) aprobaron este jueves una resolución en la que afirman que "cualquier futuro diálogo político con las autoridades de la Isla tiene que vincularse a la mejora (…) de los derechos humanos" en Cuba, informó Europa Press.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso; el canciller de Austria y presidente semestral de la Unión Europea (UE), Wolfgang Schussel; la canciller de Alemania, Angela Merkel, y los primeros ministros de Países Bajos, Jan Peter Balkenende, y de Luxemburgo, Jean Claude Juncker, suscribieron la declaración, que reitera la "condena firme" a la "constante violación de los derechos humanos" en la Isla.
El texto, aprobado en la reunión que celebra tradicionalmente el PPE horas antes de que dé comienzo cada Consejo Europeo, "urge al régimen comunista a que libere de manera incondicional a los prisioneros y respete los derechos humanos y la dignidad de los individuos".
Asimismo, reclama a las autoridades cubanas que permitan el acceso a Internet a los disidentes, "a los que se impide tener contacto con el mundo exterior", y que el opositor Oswaldo Payá y las Damas de Blanco —ambos reconocidos con el Premio Sajarov a la Libertad de Conciencia, que otorga el Parlamento Europeo— puedan visitar las instituciones comunitarias.
El lunes pasado, los ministros europeos de Asuntos Exteriores reclamaron "progresos concretos" en el respeto de los derechos fundamentales y lamentaron el deterioro de la situación de los derechos humanos en Cuba desde junio de 2005.
No obstante, decidieron mantener la suspensión de las medidas diplomáticas adoptadas en 2003 para protestar por el encarcelamiento de 75 disidentes y continuar la política de diálogo.
En su resolución de este miércoles, el PPE constata que "el número de prisioneros está aumentando desde el cambio de la política de la UE hacia Cuba en enero de 2005", fecha en la que se acordó la suspensión temporal de las sanciones diplomáticas.
El PPE pide a la UE que continúe vigilando los acontecimientos relativos a los derechos humanos e insta a los Estados miembros a "que siempre inviten a los disidentes a sus fiestas nacionales y otros eventos para darles visibilidad internacional y contribuir a su seguridad personal".
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