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Tras el Clásico, los expertos comienzan a hacer valoraciones sobre quiénes estarían en condiciones de jugar en clubes profesionales.

Si los peloteros cubanos han destrozado el mito de las Grandes Ligas, ¿por qué ninguno de los llegados últimamente a EE UU es siquiera fijo en equipos débiles?

En la capital del exilio nadie se mostró indiferente con el equipo de la Isla: A favor, en contra y una mezcla de ambas cosas.

La sorpresa de Cuba y un fervor beisbolero nunca antes visto a nivel internacional.

Las autoridades deportivas de la Isla apelan a los mejores, a pesar del riesgo de deserciones en Puerto Rico.

Los cubanos Cristóbal Torriente y José de la Caridad Méndez fueron exaltados a Cooperstown, pero quedó fuera el gran Minnie Miñoso.

Sancionados por dopaje, Alex Sánchez y Rafael Palmeiro esperan el llamado de algún equipo.

Grupo C: Puerto Rico, Holanda y Panamá también darán la batalla por la segunda vuelta.

Aunque con ausencias notables, el equipo de EE UU tiene suficiente arsenal para conseguir el título.

A Liván Hernández no le fue permitido lanzar con Puerto Rico. ¿Cuánto hubo de legítimo y cuánto de presiones de La Habana en tal decisión?