Actualizado: 25/04/2024 19:17
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Chile

Un ex colaborador de Pinochet lo vincula al tráfico de cocaína

El general retirado Manuel Contreras sostiene que los beneficios que produjeron esas operaciones forman parte del patrimonio del ex dictador y su familia.

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El general chileno retirado Manuel Contreras, creador de la policía política que operó durante la dictadura militar de Augusto Pinochet, acusó el martes al ex dictador y al menor de sus cinco hijos de estar vinculados con el tráfico de cocaína, informó la AFP.

Contreras, fundador de la temida DINA (Dirección de Inteligencia Nacional), reiteró su denuncia ante el fiscal Héctor Barros, que lo interrogó durante cuatro horas en el penal Cordillera, al este de Santiago, donde cumple prisión por violaciones de los derechos humanos.

El ex colaborador de Pinochet insistió en vincular al ex dictador y a su hijo Marco Antonio en la fabricación y tráfico de "cocaína negra", un estupefaciente inodoro difícil de detectar en los controles aduaneros, confirmó el fiscal a la prensa.

El fiscal interrogó a Contreras tras la querella que presentó el hijo de Pinochet contra el ex colaborador de su padre, al que acusó de injurias y calumnias por el informe que remitió al juez Claudio Pávez, donde reveló las operaciones de narcotráfico.

En el documento, que el juez recibió el pasado 23 de junio, Contreras sostuvo que los beneficios que produjeron esas operaciones forman parte del patrimonio de Pinochet y su familia, cuyo origen investiga otro tribunal después del descubrimiento de cuentas bancarias secretas del ex dictador en Estados Unidos y otros países.

El juez Pávez investiga el asesinato del coronel Gerardo Huber en enero de 1992, un mes después del descubrimiento de un contrabando de armas chilenas a Croacia cuando Pinochet era comandante en jefe del Ejército.

Contreras, que cumple una condena de 15 años, señaló en su informe que el ex dictador, su hijo y el empresario de origen sirio Edgardo Bathich montaron en dependencias del Ejército una red de fabricación y venta de cocaína "negra".

De acuerdo con su versión, la droga se enviaba a Estados Unidos y Europa y en su elaboración participó el químico Eugenio Berríos, que huyó a Uruguay en octubre de 1991 y cuyo cadáver apareció cuatro años después en una playa cercana a Montevideo con varios impactos de bala.