El Grupo C del Clásico Mundial de Béisbol es quizás el más débil de los dos de occidente. Los tres oponentes a los que se enfrentará el equipo cubano tienen características totalmente distintas, así como diferencias en el pasado beisbolero.

Puerto Rico, uno de los países latinos de mayor tradición, ha sufrido una pequeña baja en los últimos años, aunque todavía mantiene un equipo totalmente conformado con peloteros de nivel que participan en las Grandes Ligas.

Panamá, históricamente, ha dado buenas individualidades. Un buen ejemplo son Rod Carew —integrante del Salón de la Fama— y el actual taponero de los Yankees de Nueva York, Mariano Rivera. Sin embargo, no es uno de los países más representativos dentro de este deporte.

En Holanda, el béisbol no es uno de los deportes favoritos, aunque, junto a Italia, es la reina indiscutible del viejo continente. El derecho Bert Blyleven, con 287 victorias, ha sido el mejor de su país en las Ligas Mayores.

Jugando en casa

Los boricuas han sufrido un pequeño retroceso. Si comparamos su desempeño con la última década, los años donde Juan González, Roberto Alomar, Bernie Williams, Carlos Baerga e Ivan Rodríguez campeaban por su respeto en las Grandes Ligas, han quedado atrás. Pese a eso, mantienen un elenco lleno de figuras consagradas en las Mayores.

En la receptoría, los puertorriqueños tienen una verdadera constelación de estrellas. Además del ya mencionado Pudge Rodríguez (Detroit), los hermanos Yadier (San Luis) y Bengie Molina (Toronto), conforman un agradable dolor de cabeza para su manager José Oquendo. Cualquiera de ellos puede defender esa posición.

La inicial no puede estar cubierta por otro que no sea el toletero Carlos Delgado, recientemente cambiado a los Mets de Nueva York. Alex Cintron (Arizona), Felipe López (Cincinnati), José Hernández (Pittsburgh), José Vidro (Washington), Carlos Baerga (sin contrato), Alex Cora (Boston), Eduardo Pérez (Cleveland), hijo del camagüeyano Tany Pérez, completan el cuadro.

En los jardines, Carlos Beltrán, jardinero central de los Mets de Nueva York, encabeza el pelotón. Le siguen José Cruz Jr. (Los Ángeles Dodgers), David de Jesús (Kansas City), Ricky Ledee (Dodgers), Rubén Sierra (Minnesota), Bernie Williams (Nueva York Yankees), Juan González (sin contrato) y Alex Ríos (Toronto).

Es en el pitcheo abridor donde más lagunas tiene esta novena. Como abridores, sólo hay dos figuras reconocidas: Javier Vázquez, de los Medias Blancas de Chicago, y Joel Piñeiro, de los Marineros de Seattle. El relevo es más profundo. Cuenta con los brazos de J.C. Romero (Dodgers), Fernando Cabrera (Cleveland), Kiko Calero (Oakland), Pedro Feliciano (Nueva York Mets), Juan Padilla (Nueva York Mets) y con el veterano Roberto Hernández (Pittsburgh).

Esta novena no es la favorita para ganar el torneo, pero luce fuerte para avanzar a la segunda ronda. Tiene la ventaja de jugar en su patio, además de unas buenas ofensiva y defensa, a pesar que algunos de sus integrantes están ya un poco pasados de edad.

Puerto Rico tiene una espina clavada: en las últimas Series del Caribe no ha tenido buenas actuaciones. Ha visto a jugadores de naciones como República Dominicana y Venezuela dominar los titulares beisboleros. El Clásico sería el escenario perfecto para reivindicarse en el mundo del béisbol.

Panamá en un mal momento

La ausencia de los estelares Mariano Rivera, Olmedo Sáenz, y más recientemente la de José Macías, ha debilitado a una selección que ya de por sí se veía disminuida en varios aspectos.

Nueve panameños accionaron en las Grandes Ligas en la temporada pasada, de los cuales sólo cinco lucen como seguros dentro de este equipo. Otro que debutó en 2005, el torpedero Ángel Chávez, prefirió abandonar recientemente el entrenamiento en su país y viajar a Arizona para incorporarse al entrenamiento primaveral de los Gigantes de San Francisco.

Las figuras estelares de Panamá son el cuarto bate estrella de los Cerveceros de Milwaukee, Carlos Lee (32 jonrones y 114 carreras empujadas), y el lanzador abridor de los Orioles de Baltimore, Bruce Chen, quien terminó 2005 con balance de 13 victorias, 10 derrotas y efectividad de 3.83, en 32 juegos iniciados.

Otros que pueden estar en el equipo son el veterano lanzador derecho Ramiro Mendoza, actualmente en los Yankees de Nueva York, y el receptor Einar Díaz, de los Indios de Cleveland. Los jardineros Sherman Obando, Fernando Seguinol y Rubén Rivera, actualmente sin contrato, han tenido experiencia en las Mayores en temporadas pasadas.

Al igual que los jugadores de cuadro Julio Zuleta, Orlando Miller; el receptor Julio Mosquera y el lanzador Roger Deago, este último en la organización de los Padres de San Diego.

Sin lugar a dudas, las bajas de los jugadores importantes en este equipo se harán sentir y le harán el trabajo más difícil al entrenador Roberto Kelly. Sólo queda por ver si el entrenamiento que han llevado desde el mes de diciembre, dará resultado en el campeonato.

Holanda: ¿La cenicienta?

Holanda, a pesar de estar reconocida como el equipo de menos historia dentro de este grupo y uno de los más débiles del torneo, no luce que sea la cenicienta. Recibió una inyección de calidad al incorporar a los jugadores de Grandes Ligas Mark Mulder, lanzador de los Cardenales de San Luis, y Kirk Saarloos y Danny Haren, abridores de los Atléticos de Oakland. El antesalista de los Azulejos de Toronto, Shea Hillebrand, también fue incluido.

Estos cuatro peloteros se unen a Andruw Jones, jardinero central de los Bravos de Atlanta y Sidney Ponson, de los Cardenales; así como a Eugene Kingsale (jardinero) Calvin Maduro (lanzador), y Randall Simón e Ivannon Coffie, jugadores de cuadro. Estos últimos, sin contrato en el béisbol profesional estadounidense, pero con experiencia en las Mayores.

Andruw Jones viene de su mejor temporada. Segundo en la votación MVP de la Liga Nacional, fue líder en las Mayores con 51 jonrones y en su liga con 128 carreras empujadas. Como cada año, resultó ser el ganador del Guante de Oro. Lleva ocho ganados en Grandes Ligas y no es descabellado pensar que el pelotero nacido en Curazao sea el mejor jardinero central del béisbol.

El torpedero Yurendell de Caster, novato de los Piratas de Pittsburgh, fue líder en la Liga de Venezuela con 17 jonrones y se perfila como el regular de esa posición. Holanda terminó cuarta en el último Campeonato Mundial de Béisbol, realizado en ese país en 2005, y de la mano de su manager, Robert Eenhoorn, pudieran dar más de una sorpresa.

Los dos que avancen en este grupo, jugarán los cuartos de finales en la misma sede con los dos primeros del Grupo D, integrado por Venezuela, República Dominicana, Australia e Italia.

Si analizamos la historia, los lógicos favoritos para pasar a la segunda fase serán Puerto Rico y Cuba. Pero si los europeos llevan a los jugadores antes mencionados y los panameños están en buena forma, cualquier cosa pudiera suceder. Todo se decidirá en el terreno del estadio Hiram Bithorn, de la capital de Puerto Rico, San Juan.

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