Colombia dijo el jueves sin dar detalles que entregó a Brasil información clave hallada en las computadoras de un líder de las FARC, mientras que una revista aseguró que se trataría de correos electrónicos que relacionan al grupo ilegal armado con altos funcionarios en Brasilia, informó Reuters. La información fue rápidamente desmentida por el gobierno brasileño.

El semanario colombiano Cambio aseguró que tuvo acceso a 85 correos enviados entre febrero de 1999 y febrero del 2008, en los que se citan contactos entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y altas esferas del gobierno brasileño, el oficialista Partido de los Trabajadores, políticos y la administración de justicia.

De acuerdo con la revista, en los correos se menciona a la ex diputada María José Maninha, al asesor de asuntos internacionales Marco Aurelio García, a los dirigentes del PT Breno Altman y Silvino Heck, al actual canciller, Censo Amorim, y al jefe de gabinete de la presidencia, Gilberto Carvalho.

Los correos habrían sido hallados en los computadores de alias "Raúl Reyes", el número dos de las FARC, que murió en un bombardeo colombiano contra un campamento de la organización en territorio ecuatoriano el pasado 1 de marzo.

El gobierno colombiano reconoció que informó a Brasil sobre el hallazgo de información relevante, pero no ofreció detalles sobre el contenido.

"El gobierno de Colombia le entregó al de Brasil hace más un mes toda esa información y, por supuesto, nosotros lo hacemos en el entendido de que cada gobierno en su buen saber y entender darán curso a esa información para establecer las investigaciones a que haya lugar", dijo el canciller colombiano, Jaime Bermúdez.

Según Cambio, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, le aviso en una reunión privada a su par brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, "sobre una serie de archivos que las autoridades colombianas encontraron en los computadores de Raúl Reyes que comprometían a ciudadanos y funcionarios de su gobierno con las FARC".

La reunión entre los dos mandatarios se realizó entre el 19 y el 20 de julio pasados, cuando Lula cumplió una visita oficial a Colombia.

La revista agregó que los correos relacionan gestiones realizadas por alias "Oliverio Medina", el representante de las FARC en Brasil, que fue capturado en ese país gracias a la ayuda de autoridades colombianas, pero que actualmente goza del estatus de refugiado político.

El gobierno brasileño rechazó las acusaciones. "Nunca hubo" ningún tipo de "contacto, directo o indirecto, del canciller Amorim con cualquier miembro o representante de las FARC", afirmó categóricamente la asesoría de prensa de la cancillería, señalando que el tema "no merecía una nota oficial", reportó la AFP.

Por su parte, el jefe del gabinete personal del presidente Lula, Gilberto Carvalho, dijo a la prensa que el gobierno brasileño tiene "cero relación con las FARC. La posición del gobierno es muy clara contra los métodos de las FARC y los secuestros".

Un funcionario del Palacio de Planalto (sede del gobierno) que integró la comitiva de Lula en su reciente viaje a Colombia y que pidió el anonimato dijo a la AFP que "esa versión no tiene pies ni cabeza. Es una tontería".

La misma fuente narró que, al conocer que Cambio indicaba que había sido contactado por el dirigente político Plinio de Arruda Sampaio en favor de representantes de las FARC, el canciller Amorim soltó una sonora carcajada. "Hace por lo menos 20 años que no hablo con Plinio", afirmó.

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