Rusia puso fin el jueves a su operación antiterrorista en Chechenia, una medida que podría permitir el retiro de decenas de miles de soldados de la república rusa conmovida por dos guerras separatistas en los últimos quince años, informó AP.

Esa operación incluyó toques de queda, limitaciones al acceso de los periodistas y restricciones a los vuelos de aerolíneas civiles, entre otras medidas.

La cancelación fue ordenada por el presidente Dmitry Medvedev y entró en efecto el jueves por la mañana, según el Comité Nacional Antiterrorista, que no suministró más detalles.

El presidente chechenio Ramzan Kadyrov es un ex jefe rebelde que mantiene estrechos lazos con el Kremlin. Con frecuencia es criticado por grupos defensores de los derechos humanos por gobernar con brutalidad y reprimir las opiniones opositoras. Se dice que su cuerpo de agentes de seguridad ha secuestrado y matado a opositores y supuestos rebeldes.

"Hoy, la república de Chechenia es, como lo reconocen miles de huéspedes incluyendo políticos, empresarios, periodistas y personalidades culturales, una región pacífica y en desarrollo", dijo Kadyrov, según la agencia noticiosa Interfax. "Poner fin a la operación antiterrorista sólo contribuirá al crecimiento económico de la república".

El vocero del Ministerio del Interior, coronel Vasily Panchenkov, dijo el mes pasado que el fin del régimen antiterrorista podría permitir el retiro de unos 20.000 soldados de Chechenia. Panchenkov agregó que por lo menos una brigada del Ministerio del Interior y una división militar permanecerían en la república.

No se pudo determinar el número de soldados actualmente estacionados en Chechenia.

En la república se producen choques esporádicos entre milicianos y soldados, pero la lucha amainó hace varios años. Rusia ha invertido millones de dólares para reconstruir la capital, Grozny, que había sido devastada por bombardeos y artillería.

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