“Un general en el poder”, aparece en un blog del diario Juventud Rebelde. Pero no es Raúl Castro. De hecho se aclara de inmediato, desde el título: Un general en el poder: Prayuth Chan-ocha. Para que no existan equívocos.

Sin embargo, la periodista Juana Carrasco Martín, de forma intencional o inocente, está caminando por una zona minada. Porque las coincidencias saltan de inmediato:

“Chan-ocha, como es habitual, suspendió de inmediato la Constitución, decretó el toque de queda, prohibió las reuniones públicas de más de cinco personas, censuró a la prensa con el cierre de canales de televisión y emisoras radiales, amenazó con clausurar cualquier medio que «provoque agitación», incluidas las redes sociales, y detuvo a los jefes de los movimientos civiles, tanto los antigubernamentales como a los progubernamentales o «camisas rojas» del Frente Unido por la Democracia y contra la Dictadura, porque al parecer ni unos ni otros quieren el control del ejército que se concretó en Bangkok”.

Para cualquier cubano, el país, Tailandia, podría ser sustituido por su patria y al texto no habría que cambiarle una coma.

Llama la atención este post sobre el país asiático, que se limita a describir una situación, sin entrar en los acostumbrados epítetos, y adjetivos, las críticas al “imperialismo yanqui” y la crisis del capitalismo: “el diario Bangkok Post, en un editorial, advirtió al General que la intervención militar ahondará la crisis política, en vez de solucionarla, y le recordó que «el ansiado objetivo de conseguir la reconciliación nacional está cada vez más lejos que en 2006», cuando la asonada dijo tener como fin restablecer la paz y la armonía”.

“El general Prayuth Chan-ocha anunció que la Junta Militar continuará hasta 2015 y cumplidas las tareas, los uniformados regresarán a sus misiones habituales”, agrega Carrasco Martín, y los cubanos ya pueden comenzar a sentir envidia de los tailandeses.

¿Lectura en clave o simples coincidencias?

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